La playa, el mejor lugar para luchar contra la celulitis
El agua del mar, la arena, el suave masaje de las olas... Aprovecha tus escapadas a la playa para mejorar el aspecto de la piel de naranja
Cuando sepas que la celulitis también puede combatirse de forma lúdica, pasándotelo bien, te apetecerá aún más organizar un día en la playa. Aunque no podrás enviar de vacaciones a tus anticelulíticos, sí lograrás atenuar las depresiones y hendiduras que caracterizan la piel de naranja.
El contraste frío y calor va de fábula
No te sientas culpable por tomar el sol relajadamente porque el contraste entre el calor que acumula tu piel y el agua fría del mar activa la circulación y drena las toxinas atrapadas bajo los hoyuelos de la piel. ¡Obtendrás gratis ese efecto tan aclamado en spas de belleza y en anticelulíticos de última generación!
GANA FIRMEZA. Con las altas temperaturas del sol, los vasos sanguíneos se expanden y bajo el agua fría, en cambio, se contraen. Esto impulsa la circulación y reafirma la piel.
A TENER EN CUENTA. Recuerda eso sí que los excesos bajo el sol agravan la flacidez y empeoran el aspecto de las zonas con celulitis que más sucumben al efecto de la gravedad –glúteos y muslos–. ¿Solución? Aplicar una crema de alta protección solar, beber mucha agua y buscar el cobijo del parasol. Recuerda que no es buena idea ponerse un anticelulítico justo antes de darse un baño de sol porque puede provocar manchas en la piel.
La arena es el mejor exfoliante
Aprovecha cualquier zambullida para exfoliar la piel con arena de la playa. Aplícala con movimientos vigorosos, de abajo hacia arriba en muslos y cartucheras, y dibujando círculos en el vientre y los glúteos. Si lo ves necesario, llévate el guante de crin a la playa.
TALASOTERAPIA. Aparte de activar el drenaje linfático y la microcirculación sanguínea, eliminar las células muertas de la piel mejora la absorción de los oligoelemento del agua del mar, unos compuestos capaces de oxigenar la piel y retrasar su envejecimiento. Si después de unas vacaciones en la playa notas que tu celulitis ha ido a menos es por dos motivos: el bronceado disimula los típicos hoyuelos de la celulitis y los baños en el agua salada favorecen la eliminación, a través de la piel, de toxinas y líquidos retenidos. Por algo será que las cremas anticelulíticas incluyen ingredientes marinos: algas, yodo, etc.
Muévete contra la piel de naranja
El ejercicio reduce poco a poco la celulitis, sobre todo si se trabajan las zonas afectadas: glúteos, piernas y caderas. Luce una piel más lisa, tonificada y firme con estas sencillas propuestas.
LARGAS CAMINATAS. Caminar descalza por la orilla del mar ya implica una mejora de la celulitis si eres constante y dedicas un mínimo de 45 minutos a esta actividad. Quemarás entre un 20 y un 50% más de calorías que si lo hicieras al mismo ritmo por una superficie plana por la resistencia que ofrece el agua y la arena.
SIGUE QUEMANDO. Jugar con las olas, hacer elevaciones de piernas y zancadas dentro del agua –realiza dos series de 20 repeticiones por cada extremidad y ejercicio– y, por supuesto, nadar y bucear es muy efectivo. Movilizarás los depósitos de grasa retenidos bajo la piel, drenarás líquidos acumulados y eliminarás toxinas –bajo el agua también se suda–.
A FAVOR Y EN CONTRA. Los expertos consideran que los mejores deportes contra la celulitis son los ejercicios en los que se usan las piernas –bailar, nadar, ir en bici, etc.–. Hay que practicarlos con regularidad, pero sin llegar a la extenuación. Y recomiendan evitar los de alto impacto –correr, saltar, crossfit, tenis, etc.–, ya que pueden dañar el tejido conectivo de las zonas afectadas por la piel de naranja y empeorarla.
Busca la calma interior
¿Sabías que el estrés y la inestabilidad emocional deterioran las fibras de colágeno, las encargadas de dar firmeza a la piel, y hacen la celulitis aún más visible? Por si no bastara, llevar una vida muy ajetreada, sin un solo hueco para cuidarte, produce hormonas que favorecen el almacenamiento de más grasa. ¡Horror!
VITAMINA C. Cuanto más tensa esté tu piel, menos se apreciará la celulitis. La vitamina C es un nutriente que favorece la producción de colágeno y, además, ayuda a reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés. Este verano, añade tomate y pimiento a tus ensaladas, toma gazpachos caseros (ojo con la sal, absorbe el agua del cuerpo e inflama los tejidos afectados), prepárate limonadas y echa al carro de la compra kiwi, mango, papaya, lima, melón, sandía y bayas del bosque.
MAGNESIO. Tanto el magnesio como las vitaminas del grupo B (en concreto la B1, la B2 y la B6) intervienen en la síntesis de colágeno y mejoran la gestión del estrés. Abundan en las semillas, los frutos secos, los cereales integrales y las legumbres.