Pelo cuidado y sano: cuidados prelavado
Aplicar, al menos una vez por semana, el aceite capilar o la mascarilla antes de lavarte el pelo tiene premio. Los rituales prechampú dejan tu cabello más suave al tacto, más suelto y con más volumen
Cuando tu melena necesite un plus de hidratación, recurre a los tratamientos prelavado. Así podrás usar productos extranutritivos y untuosos sin que apelmacen tu pelo y le resten movimiento. Es mejor aplicar el aceite capilar o la mascarilla antes del champú que después de él si, por ejemplo, tienes el cabello muy fino o lacio, y esos productos pesan sobre tu melena.
Sin residuos grasos. Otra de las preocupaciones que tienen las mujeres de pelo graso es dar con productos que aporten hidratación, pero que no dejen restos de grasa en la raíz. De nuevo, recurrir a los tratamientos prewashing es una solución. Al aplicarse antes del lavado, el champú ya se encarga de arrastrar esos indeseables residuos.
Cuero cabelludo a punto. ¿Necesita una limpieza profunda? ¿Tienes mucha caspa? ¿Se te cae el pelo? Los exfoliantes y las lociones anticaída prelavado acudirán al rescate.
Cepillado: no te saltes este paso
Antes de decidirte por el tratamiento que más necesitas, recuerda que no hay gesto de belleza prelavado más efectivo (¡y barato!) que cepillarse el pelo.
Reset capilar. Pasarte el peine o el cepillo ayuda a eliminar los restos de los productos de styling que hayas utilizado previamente –espuma, laca, etc.–. ¡Así empezarás de cero! También es una buena estrategia para salir de la ducha sin tantos enredos.
Luce pelazo con estos tratamientos
¿Tienes 20 minutos? Ése es el tiempo que lleva activar el programa prelavado y presumir de una melena más cuidada y atractiva.
Mascarilla. El agua ejerce un efecto barrera y dificulta la absorción de los activos de este tratamiento reparador. Aplicar la mascarilla en seco, por tanto, multiplica sus resultados. Extiéndela sobre las puntas y masajea en dirección ascendente. Deja actuar el tiempo indicado, como mínimo, y ya en la ducha aclara y lava tu melena con normalidad. Quienes necesiten un tratamiento de choque que deje su pelo profundamente limpio y libre de siliconas –se acumulan y ensucian el cabello–, partículas contaminantes o polvo, pueden confiar en las mascarillas prechampú de acción detox o purificante. Tras su aplicación, el pelo gana flexibilidad, cuerpo y volumen de la raíz a las puntas.
Aceite. Es uno de los rituales prelavado que más puede hacer por el cabello castigado: áspero al tacto, encrespado, apagado, etc. Impregna el cabello de medios a puntas, las zonas más estropeadas, pásate el peine para repartir bien el producto y favorecer su absorción y recógetelo en un moño durante un mínimo de 20 minutos. Tras la ducha, te notarás el cabello más desenredado, suave, brillante y domable.
Un paso más en el cuidado de tu pelo
No te contentes con acondicionar, reparar, disciplinar y sacar brillo a tu cabello porque aún puedes hacer mucho más por él.
Exfoliantes. El cuero cabelludo, al igual que el resto de la piel, sufre en primera persona el estrés o los cambios hormonales. Aunque todos los peelings tienen como misión aumentar la eficacia del champú, hay un exfoliante para cada necesidad: regulador de grasa, calmante, anticaspa, antipolución, etc. Por cierto, los de textura gel son los más fáciles de aplicar.
Tratamientos intensivos. Ampollas reparadoras efecto rescue, lociones anticaída, aceites estimulantes en roll-on... Estos cuidados tan específicos también pueden formar parte de tus rutinas prelavado.
Tu momento relax. Aprovecha la aplicación de estos productos para realizar un suave masaje del cuero cabelludo. Aparte de crear una sensación de placer inmediata y favorecer la absorción de los activos, potencia la microcirculación de la zona, lo que revitaliza el cabello de principio a fin.
Resuelve tus dudas
CUÁNDO SE APLICAN. Normalmente unos 20 minutos antes de entrar a la ducha. Aunque si utilizas unas mascarilla o un aceite capilar puedes dejarlo actuar durante horas o, incluso, toda la noche.
EFECTOS ACUMULATIVOS. Si te has aplicado una mascarilla prelavado, puedes perfectamente seguir utilizando, después de enjabonarte el pelo con el champú, el acondicionador, el sérum antienredos o el aceite reparador de puntas. ¡Todo suma!
EN SECO O CON EL PELO HÚMEDO. La mayoría de los productos prelavado se aplican sobre el cabello seco, pero como hay excepciones –algunos exfoliantes se extienden sobre el pelo ligeramente humedecido o mojado–, será mejor que leas las indicaciones de uso de cada producto.
TODOS SIRVEN. Puedes utilizar tus productos de siempre en tus rituales previos al champú. Una misma mascarilla ofrece un cuidado más ligero cuando se usa antes del lavado y un efecto más intenso en el poslavado.