El pasado 31 de diciembre, Gabriela Guillén dio la bienvenida a su primer hijo, fruto de su efímero romance con Bertín Osborne, después de unos meses muy complicados. La polémica y el interés que había suscitado su embarazo, que por parte del presentador había sido "ni buscado, ni deseado" (en sus propias palabras) desató un huracán mediático del que sigue sin conseguir salir., Desde que nació el pequeño, el presentador ha dejado claro públicamente que no quiere saber nada sobre él, y declaró tajantemente que no iba a ejercer como padre aunque se confirmase su parentesco... pero todos esos son problemas a los que la fisioterapeuta quiere mantenerse ajena, al parecer.