Harry y Meghan llegaron y se fueron del acto cogidos de la mano.
Tras seis semanas alejados de la vida pública disfrutando de una temporada sabática, los Duques de Sussex han retomado sus actos oficiales visitando el Alto Comisionado de Canadá en Londres. El motivo, “agradecer la cálida hospitalidad canadiense y el apoyo que recibieron durante su reciente estancia”, tal y como han explicado desde el Palacio de Buckinham.
Aunque Harry y Meghan Markle querían mantener el destino en el que se encontraban estos días oculto, se filtró que se encontraban en Canadá, país en el que residió la exactriz mientras trabajaba en la serie “Suits”. Según trascendió, los “royals” se alojaron en una enorme mansión frente al mar valorada en nada menos que 10 millones de dólares.
Desde allí mandaron su original felicitación navideña, absolutamente diferente a las que suelen enviar los miembros de la realeza, acostumbrados a “Christmas” mucho más solemnes.
Meghan, que fue madre del pequeño Archie hace 8 meses, lució un abrigo de corte clásico en color camel, una falda midi también en tono marrón y zapatos con pronunciado tacón Jimmy Choo.
Desde la cuenta de Instagram de los Duques, compartieron este vídeo recopilatorio de su visita, donde mantuvieron un encuentro con Janice Charette, alta comisionada de Canadá en el Reino Unido.