La reina Margarita de Dinamarca recibe el alta tras su caída a los 84 años
La monarca danesa se recupera en su residencia tras un accidente por el que tendrá que llevar collarín y escayola en la mano izquierda
Margarita de Dinamarca sufrió una caída en el castillo Fredensborg.
La reina Margarita II de Dinamarca ha recibido el alta hospitalaria tras pasar varios días ingresada a causa de una caída que sufrió recientemente. La monarca, de 84 años, se encuentra ya en su residencia recuperándose de las consecuencias del accidente, que la ha dejado con collarín debido a "daños en las vértebras del cuello" y una escayola en la mano izquierda a causa de una fractura, según ha informado la Casa Real danesa. Aunque su estado de salud es estable, la caída ha generado preocupación sobre su capacidad para continuar con sus actividades oficiales.
El incidente ocurrió mientras la reina se encontraba en en el castillo Fredensborg, donde perdió el equilibrio y Margarita de Dinamarca sufrió un golpe que la llevó a ser ingresada de urgencia en el hospital. Tras varios días de observación y tratamiento, los médicos decidieron darle el alta, aunque tendrá que seguir un proceso de rehabilitación para recuperar la movilidad. Los informes indican que la monarca deberá guardar reposo durante varias semanas.
Federico de Dinamarca, de viaje en Alemania
Federico de Dinamarca y su madre, la reina Margarita.
Uno de los detalles que ha llamado la atención es que, durante el ingreso hospitalario de su madre, el príncipe heredero Federico de Dinamarca se fue del país. El rey voló a Alemania para asistir a un evento automovilístico en compañía de su primo, el príncipe Gustav Sayn-Wittgenstein, y su esposa, la escritora Carina Axelsson.
A pesar de la gravedad del accidente, Federico continuó con sus compromisos en el extranjero, lo que ha generado cierta polémica en la prensa danesa y entre los ciudadanos, que esperaban verlo regresar para apoyar a su madre en este delicado momento.
La reina Margarita pospone sus compromisos
La reina Margarita, madre de Federico, abdicando el trono de Dinamarca en favor de su hijo.
La caída de la reina Margarita ha obligado a la Casa Real danesa a reorganizar su agenda. Los compromisos oficiales de la monarca, que disminuyeron a principios de año por motivos de salud, han sido cancelados o pospuestos, mientras que otros miembros de la familia real han asumido algunas de sus responsabilidades para garantizar la continuidad de los actos previstos. Se espera que la reina retome sus actividades de forma gradual, una vez que su recuperación esté más avanzada.