Leonor y Sofía, muy unidas antes de empezar caminos separados
Las dos hermanas pasarán todo el tiempo que puedan juntas este verano antes de seguir caminos diferentes
Leonor y Sofía aprovechan al máximo cada momento que pasan juntas.
Este verano va a ser para ellas intenso, distinto y con menos vacaciones porque, en poco menos de un mes, sus vidas van a tomar derroteros diferentes: mientras que el 17 de agosto Leonor se incorporará a la Academia General Militar de Zaragoza para empezar su formación castrense, Sofía tomará tres días después un vuelo a Gales para cursar bachillerato en el mismo internado donde la Princesa de Asturias ha pasado dos años. Por eso, antes de que dejen de verse y sus móviles echen humo con conversaciones diarias, quieren disfrutar del cariño y la complicidad que hay entre ellas.
Siempre pendientes una de la otra, es habitual que Sofía y Leonor tengan muestras públicas de cariño.
Sofía es el mayor apoyo para su hermana
Inseparables desde siempre –al estilo de la Reina emérita y su hermana Irene– Leonor y Sofía son colegas, amigas íntimas y confidentes. Se quieren, se ayudan, se conocen como nadie y comparten la gran presión que supone ser la heredera al trono y la segunda en la línea de sucesión de este país.
En Girona, los Reyes y sus hijas apostaron por el azul para uno de sus actos públicos.
Sofía es el mayor apoyo para Leonor no sólo en la vida privada, sino también en hacer frente a los compromisos oficiales. Por eso, la Infanta acompañó a su hermana en su visita a ElBulli1846, el museo de Ferran Adrià en Roses (Girona), un día antes de que la heredera presidiera en Caldes de Malavella la entrega de los premios de la Fundación Princesa de Girona, acto al que también fueron los reyes Felipe y Letizia.
Para la gala, Leonor optó por el verde, Sofía vistió de plata y Letizia, por un elegante negro.
Asumir con alegría la nueva etapa de su vida
La princesa dando un discurso.
Con un vestido verde satinado de cuerpo cruzado y escotado, Leonor hizo un discurso en catalán, castellano e inglés donde dejó claro que asumía con alegría una nueva etapa vital que ella no ha escogido, pero que sabe que es inevitable en su destino. "Me siento con muchas ganas y convencida de seguir aprendiendo y entregando mi mejor ánimo", dijo, nerviosa y sonriente. Y, por descontado, Sofía siempre estará a su lado.