Cuatro semanas después de que la Princesa de Asturias jurase la Constitución con motivo de su 18º cumpleaños, se han cumplido los pronósticos: a partir de ahora, Leonor se unirá a sus padres en compromisos de trascendencia social y política como parte de su preparación para, más pronto que tarde, asumir una agenda propia y, en un futuro, convertirse en Reina.