La reina Letizia se enfrenta a su peor momento como madre
Dentro de muy poco, Leonor y Sofía ya no vivirán con la Reina, quien deberá sobrellevar la ausencia de sus queridas hijas
A pesar de que, desde que sus dos hijas vinieron al mundo, Letizia sabía que, un día, tanto Leonor como Sofía iban a volar solas y no vivirían con ella bajo el mismo techo, no va a ser plato de buen gusto para la Reina afrontar un cambio así, que se producirá muy pronto, en apenas unos pocos meses.
A finales de agosto, Sofía se marchará a Gales para, al igual que hizo su hermana, estudiar los dos años de bachillerato en el UWC Atlantic College. Inmersa en el día a día escolar, la Infanta podrá regresar a España en contadas ocasiones, cuando tenga vacaciones y todo apunta a que no sería hasta Navidad cuando podría estar de vuelta para pasar unos días en nuestro país.
Hasta ahora, la benjamina de la casa ha estudiado en Madrid, lo que ha hecho más llevadera para su madre la ausencia de Leonor. Sin embargo, se da la circunstancia de que, a partir de septiembre, Letizia no tendrá a ninguna de sus dos hijas en palacio, puesto que la primogénita ya habrá regresado de Gran Bretaña pero empieza una nueva etapa formativa: la militar.
Leonor, a menos kilómetros que Sofía
Consciente de que todo ello es necesario para el futuro de sus dos hijas, la Reina las anima a emprender con ilusión estas nuevas fases de sus respectivas vidas, aunque, como toda madre que se tiene que separar de sus hijas, sentirá una especie de vacío difícil de llenar.
Obviamente, podrá hablar por videoconferencia con ellas a menudo, pero no será lo mismo que tenerlas en casa y compartir anécdotas y, sobre todo, caricias. Basta con ver las fotos de Letizia con sus "niñas", incluso en actos oficiales, para afirmar, sin temor a equivocarse, que la esposa de Felipe VI siempre ha sido una madre cariñosa.
Aunque Leonor tampoco residirá en la Zarzuela, puesto que tiene previsto desplazarse hasta Zaragoza para realizar el primer curso de la Academia General del Ejército de Tierra, seguirá en España, lo que podría facilitar las escapadas de la joven a Madrid cuando disponga de algún permiso.
También parece más que probable que la heredera pueda ausentarse de la academia por sus deberes institucionales, como la entrega de los Premios Princesa de Asturias, que tienen lugar en octubre y que sería una ocasión propicia para que madre e hija se vieran y se pusieran al día.
Letizia se volcará en su agenda institucional
A buen seguro que a Letizia le encantaría que su primogénita pudiera estar con ellos el 31 de octubre, día en el que alcanzará su mayoría de edad, pero está por ver si podrá ser. Por el momento, se sabe que Leonor no jurará la Constitución el mismo día de su aniversario. Se da la circunstancia de que el Parlamento estará disuelto por la convocatoria de elecciones generales, lo que retrasará la fecha de este acontecimiento que se producirá cuando esté constituido el nuevo Gobierno salido de los comicios.
Mientras sus hijas prosigan con sus vidas lejos de palacio, Letizia se volcará en su labor institucional e irá acometiendo los diferentes actos de su agenda.
Sin embargo, cuando vuelva a casa echará de menos poder conocer cómo ha transcurrido la jornada de sus dos hijas o hacer planes de cara al fin de semana, ya que las tres comparten aficiones y se ha vuelto habitual que vayan juntas al cine, a un concierto (como este verano, cuando fueron a ver a Rosalía) o a un espectáculo teatral.
Desde siempre, la Reina ha tenido una relación muy cómplice con Leonor y Sofía, al mismo tiempo que, como madre, ha supervisado las materias que estaban estudiando, orientándolas en todo lo que estaba en su mano. En el mismo sentido ha actuado a la hora de enseñarles a llevar una vida sana, tanto en lo que respecta a la alimentación como en la práctica de actividad física.
Un espejo en el que se miran
Si, de puertas para adentro, Letizia ha sido una madraza que ha alternado cariño y firmeza en la educación de sus chicas, en lo que respecta al rol público que han de desempeñar Leonor y Sofía, el ejemplo que éstas han recibido de su progenitora no podía ser mejor.
Ha estado pendiente de ambas, pero quizá por su mayor proyección pública ha sido en Leonor en la que los españoles hemos podido apreciar más la influencia de su madre. Por ejemplo, en los discursos que la joven ha dado hasta ahora, su manera de dirigirse al público recuerda mucho al estilo de la Reina. Lo cierto es que las tres forman un excelente equipo que, para su pesar, ahora se verá obligado a estar separado.