Sofía: la alegría de la reina Letizia en su momento más triste
Espontánea y vivaracha, la segunda hija de los Reyes parecía crecer menos presionada que Leonor, pero, en realidad, ambas recibían idéntica formación, pues su papel en el engranaje de la Corona también es crucial
La infanta Sofía en una preciosa imagen de cuando era pequeña.
Al relatar la vida de la infanta Sofía, es fácil caer en la constante comparación con su hermana mayor, Leonor, que está destinada a ser Reina de España. Sin embargo, la segunda hija de los Reyes es mucho más que un mero complemento o un "repuesto" de la heredera y tiene un papel de gran relevancia dentro de la institución.
Sofía, una bebé adorable.
Para empezar, su nacimiento calmó a los sectores preocupados por la vigencia del artículo 57 de la Constitución de 1978, que dice que "la sucesión en el trono seguirá el orden regular de primogenitura siendo preferido (...) en el mismo grado, el varón a la mujer". Es decir, que de haber nacido chico, sería el heredero, algo difícil de justificar en el siglo XXI, cuando las únicas monarquías que mantienen esa norma son España y el Reino Unido, lo que obligaría a reformar la Constitución.
Siempre con una sonrisa o con un gesto espontáneo, Sofía enamoró a las cámaras
desde bien pequeña.
Revoltosa en los posados
La infanta Sofía se tapa los oídos en el desfile de las fuerzas aéreas junto a la reina Letizia y la princesa Leonor.
Pero, además, Sofía llegó al mundo el 29 de abril del 2007, dos meses después de que la hermana menor de la Reina, Érika Ortiz, pusiera tristemente fin a su vida, por lo que la niña se convirtió, desde el primer momento, en el mejor consuelo para el profundo dolor de su madre.
Una niña muy traviesa y divertida
Sofía y Leonor durante sus vacaciones en Mallorca.
Al igual que sucedía con Leonor, los Reyes deseaban para Sofía una infancia lo más normal posible, así que, en sus primeros años de vida tan sólo pudimos verla en las postales de Navidad, las vacaciones de verano o en eventos familiares, como la Primera Comunión de Juan y Pablo Urdangarin, que se celebró en Barcelona en mayo del 2009, y en la que la pequeña Infanta, de sólo 2 años, hizo pasar un mal rato a sus padres al negarse a posar con toda la familia, escapando a la mínima que los mayores se despistaban muerta de risa.
Aunque los Reyes no hagan distinciones entre sus hijas, Sofía, que era más movida
y mimosa que Leonor, despertaba el lado más tierno de sus padres.
En septiembre de ese mismo año, Sofía empezó a acudir a la Escuela Infantil de La Guardia Real, ubicada dentro del recinto del Palacio de El Pardo, y un año después, ingresó en el Colegio Santa María de los Rosales, un centro laico en el que también estudió su padre, el rey Felipe, y al que acudía con la princesa Leonor.
Siempre que sus compromisos se lo permitían, eran los propios Reyes quienes llevaban a sus hijas al colegio, aprovechando ese rato en coche para ayudarlas a repasar la lección o el plan del día.
“Sofía, pareces un robot"
Sofía ejerce el papel de "escudera" con Leonor desde que las dos niñas eran muy pequeñas.
Apasionada de las nuevas tecnologías, como tantos niños de su edad, a los 7 años le regaló a su padre por su cumpleaños una lista de reproducción de canciones en el móvil entre las que estaba el Himno Nacional.
Gran amante del fútbol
La Reina, que es la principal y mejor "ayudante" del Rey, está siempre pendiente de Sofía.
Aunque el primer evento público de Sofía fue en la Academia del Aire de San Javier, cuando más nos llamó la atención fue en su primera recepción oficial en palacio, cuando, con sus padres y su hermana recibió a la selección española de fútbol, tras proclamarse campeones del mundo en el 2010.
Levantando la copa con mucho esfuerzo y luciendo una réplica de la camiseta con su nombre, estaba de lo más divertida y, quién sabe, tal vez esa jornada ayudó a convertirla en la gran "futbolera" que es hoy.
En este enlace puedes ver a la infanta Sofía hablando por primera vez en
televisión para apoyar a la selección femenina de fútbol.
Sofía muestra un gran interés por la moda. Su estilo ha llamado la atención de los medios de comunicación extranjeros.
Pero la Infanta se metió realmente a la gente en el bolsillo con el vídeo que la Zarzuela difundió con motivo del 50º cumpleaños del Rey y en el que sonreía "granujilla" a cámara cuando su hermana se quemó con el potaje que estaban comiendo.
Desde muy pequeña, la Infanta se ha revelado como una niña deportista.
Doña Sofía habla de su nieta con gran orgullo.
En otra ocasión, tras el tradicional posado de los Reyes y sus hijas en Palma de Mallorca, la niña iba dando la mano a los periodistas diciendo "buenas tardes, buenas tardes, buenas tardes..." y Letizia la reprendió en broma: "Sofía, pareces un robot".
Al igual que su hermana, la princesa Leonor, Sofía es muy cariñosa con sus abuelos.
Por otro lado, desde bien pequeña, la infanta demostró un llamativo interés por la moda explorando distintos "looks" y peinados que la llevaron a convertirse en una adolescente de lo más estilosa. Es por ello que muchos no descartan que acabe convirtiéndose en una auténtica 'it girl'.