Hijo preferido de Isabel II, el Duque de York está metido en tal lío que su augusta madre ha salido en su ayuda, llevándoselo a Balmoral (Escocia) para intentar apartarlo de un escándalo que apenas ha empezado. Y es que el exmarido de Sarah Ferguson está metido de lleno en el caso Jeffrey Epstein, el magnate acusado de abuso y explotación sexual de menores, que se suicidó el pasado sábado 10 de agosto en una prisión de Nueva York.
Buckingham ha negado que el príncipe tenga nada que ver con este turbio asunto, pero empiezan a aflorar declaraciones de víctimas que lo incriminan. No te pierdas, esta semana en Pronto, todos los detalles de este asunto.