La visita al arzobispo Desmond Tutu y su familia ha sido el primer acto oficial del Baby Sussex.
Los duques de Sussex, Meghan y Harry, han llevado a su pequeño de cuatro meses a su viaje oficial a Sudáfrica y el bebé ha enamorado a todo el mundo. Durante el tercer día de su visita, Archie acudió junto a sus padres a tomar el té con el arzobispo Desmond Tutu y su familia, en su fundación de la Ciudad del Cabo.
La expectación en torno a la posible participación del pequeño en la agenda de sus padres era máxima, ya que apenas se le había vuelto a ver desde mayo, cuando le presentaran en público con un posado oficial a los pocos días de su nacimiento, en el día de su bautizo.
El bebé, además de ser muy risueño y divertido, ha heredado el cabello pelirrojo de su padre y los ojos de su madre. Con su cabeza pelona, sus calcetincitos, sus pantalones de moda sostenible de 10 euros, y sobre todo, con su sonrisa, Archie ha embelesó al arzobispo Desmod Tutu, con quien «desayunó» en la fundación que lleva su nombre, pero también a todos los que lo hemos visto reír, bailar y balbucear en la cuenta de Instagram de sus padres.
Ciudad del Cabo es la primera parada dentro de un viaje que también llevará al príncipe Harry a Botsuana, Angola y Malaui, mientras que la duquesa y su hijo se quedarán en Sudáfrica.
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