El príncipe Guillermo se mueve por su casa en un patinete de 6.000 euros
El heredero al trono usa este transporte para desplazarse de su casa hasta Windsor
El príncipe de Inglaterra en Ascot.
El príncipe Guillermo suele mantener la compostura, aunque últimamente hemos podido verlo en el concierto de Taylor Swift pasándolo bien con sus hijos. El hijo del rey Carlos III ha sorprendido esta vez desplazándose con un patinete de lujo.
La familia real británica ya nos tiene acostumbrados a todo tipo de vehículos: desde su barco oficial, hasta sus carruajes o aviones privados. Pero hasta la fecha no habíamos podido ver a nadie del clan en un patinete eléctrico.
Guillermo adquirió el patinete el año pasado
El príncipe Guillermo junto a sus hijos mayores en el concierto de Taylor Swift.
El heredero al trono se hizo con el patinete el año pasado, cuyo coste fue de más de 5.500 euros, como medio de transporte para recorrer los terrenos de Windsor.
Con gafas de sol y jersey, el marido de Kate Middleton recorre a gran velocidad la distancia que separa su residencia familiar, Adelaide Cottage, del castillo de Windsor donde reside su padre.
El duque está muy concienciado sobre el medio ambiente, algo que le inculcó su padre y que él transmite a sus hijos.
Según el diario inglés ‘Daily Mail’ el vídeo fue grabado por una turista la semana pasada, coincidiendo con las elecciones generales del Reino Unido.
El príncipe Guillermo siente pasión por el motor
El duque de Gales aprendió a pilotar durante su formación militar.
Es conocido que el hijo mayor de Lady Di siente pasión por el motor y la conducción, sobre todo, por las motos. Guillermo está concienciado sobre el medioambiente y el cambio climático, es por eso por lo que ha decidido usar un transporte eléctrico y reducir su huella de carbono, al menos para moverse entre residencias.
Guillermo usa el patinete para visitar a su padre, el rey Carlos III.
En Reino Unido los patinetes eléctricos están prohibidos en la vía pública y solo pueden usarse en recintos privados. Del castillo de Windsor a Adelaide Cottage les separan poco más de un kilómetro, perfecto para hacer rodar el nuevo juguete del príncipe.
Una buena manera de tener independencia y poder visitar Windsor en cuestión de minutos.