Sarah Ferguson, adiós a su trabajo como presentadora: la han despedido
Su despido ha coincidido con el diagnóstico de un agresivo cáncer de piel
Delicados momentos de salud para la familia real británica
Sarah mostrando unas 'cookies' personalizadas.
Y es que, a los problemas de salud del rey Carlos III, que deberá ser operado de la próstata, y de Kate Middleton, que sigue ingresada, se suman los de Ferguson, que ha sido diagnosticada con el tipo más grave de cáncer de piel, tan solo seis eses después de ser tratada de un cáncer de mama.
Andrés de Inglaterra empaquetando magdalenas con Sarah.
Tal y como ha adelantado 'The Sun', Sarah Ferguson padece un melanoma, un cáncer de piel muy grave y agresivo. El pasado diciembre la madre de las princesas Beatriz y Eugenia de York se sometió a una masectomía y a una reconstrucción mamaria -debido al cáncer de mama que le fue diagnosticado hace seis meses- y en dicha intervención se le extrajeron varios lunares para ser analizados.
Y uno de ellos, como ha confirmado un portavoz de la duquesa de York al tabloide británico, se trata de un melanoma maligno. Actualmente, y después de que se lo hayan extirpado, se encuentra recuperándose en una exclusiva clínica de Austria. Y aunque no oculta que están siendo "momentos angustiosos", afronta este duro trance de salud con ánimo y "buen humor".
Sarah se ha sincerado sobre sus problemas de salud.
En estos momentos Sarah Ferguson se estaría sometiendo a diversas pruebas para comprobar que el cáncer de piel no se haya extendido, aunque los médicos esperan que se haya tratado a tiempo.
'The Sun' apunta que ha decidido hacer pública su enfermedad para concienciar a la población de la importancia de controlar sus lunares -tamaño, forma y color- para detectar a tiempo posibles signos de melanoma, como le ha sucedido a ella.