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Ana Rosa Quintana, sobre su enfermedad: "No puedo decir que estoy dada de alta"

La periodista ha vuelto por todo lo alto a su programa

Ana Rosa Quintana se ha sincerado sobre su enfermedad.

Saray Cruz

Hoy era un día marcado en rojo en el calendario para Ana Rosa Quintana que, después de casi un año centrada en su lucha contra el cáncer y alejada del foco mediático, ha regresado a su programa. Y lo ha hecho por todo lo alto, entrevistando a dos de los personajes más buscados del momento - Alberto Núñez Feijoo y José Ortega Cano - en una mañana especialmente intensa en la que se la ha visto disfrutar como nunca.

"Me siento como si nunca me hubiese ido" ha reconocido durante el club social cuando, emocionada, ha querido agradecer el "apabullante" cariño que ha recibido estos 11 meses en los que, ha admitido, "se ha subido por las paredes" al ver por televisión en su sofá acontecimientos históricos tan relevantes como el fallecimiento de la Reina Isabel II, la invasión de Rusia a Ucrania o la devastación causada en la isla de La Palma tras la erupción del volcán de Cumbre Vieja.

Ana Rosa Quintana: "Tengo tratamiento, pero esto sigue"

"Estoy aquí porque tengo tratamiento, pero esto sigue. No podré decir que estoy curada hasta dentro de 5 años, 7 años... Esto no es de un día para otro, esto sigue, y si puedo ayudara alguna persona que haya pasado por lo mismo o que lo vaya a pasar, pues yo encantada", ha explicado emocionada, consciente de que su ejemplo ha servido a muchas personas que, al igual que ella, luchan contra el cáncer.

"Volver ha sido como una primera vez. Anoche no podía dormir. Eran nervios mezclados con emoción. Esto es como volver a la vida. Bendita rutina. He sentido nervios, nostalgia, miedo... ", ha confesado, asegurando que "físicamente me encuentro fenomenal pero no hay que echar las campanas al vuelo".

Ana Rosa estaba nerviosa pero con muchas ganas de volver.

"He acabado un tratamiento y me encuentro estupendamente, pero no estoy dada de alta. Podré decir que estoy dada de alta en 5 años o 6 años. Una vez acabas con la quimio, la radio, las intervenciones quirúrgicas, te queda un tratamiento de pastillas y revisiones, analíticas prácticamente todos los meses, revisiones cada trimestre...", ha añadido poniendo de relieve el largo proceso que todavía le queda por delante.

Ana Rosa: Así ha sido su recuperación en casa

En estos 11 meses, mucho tiempo en casa - solo rodeada por su familia y sus amigos más cercanos - y un parón necesario, ya que como ha relatado "la enfermedad es dura aun llevándolo bien y como que te retira de la vida. No sólo ha sido la enfermedad, estábamos en pandemia. Hay que tener mucho cuidado con las defensas y tu vida se limita a tener que estar muy bien para no perderme ninguna sesión. He hecho mucho deporte, he cuidado la alimentación, quería cuidarme para no perderme ninguna sesión y acabar cuanto antes".

Además, Ana Rosa ha admitido que se considera una afortunada, porque su marido ha podido acompañarla a todas las sesiones de quimio y radio "cuando hay mujeres que van solas, en metro, y vuelven a su casa y tienen hijos pequeños y hay que atenderos". "Esto rompe parejas también y yo no he estado ni un día sola. No he sentido esa soledad", ha confesado.

"Los humanos somos muy idiotas. Todos creemos que hemos aprendido muchísimo sobre experiencias que cambian la vida. Sé que mi vida tiene que cambiar", ha señalado, reconociendo que "no puedo tener el ritmo que tenía antes. Si los médicos me han dejado incorporarme es con el compromiso de que me voy a cuidar".

"El compromiso de que no voy a hacer más cosas que el programa, voy a descansar todo lo que pueda, no voy a tener estrés, no voy a tener disgustos... Yo he sido muy positiva durante la enfermedad y creo que lo seguiré siendo" ha asegurado.

Por eso, en este momento de su vida, Ana Rosa se ha propuesto "aprender a valorar más las cosas, el tiempo libre, a agradecer más...". "He sentido tanto apoyo, tanto cariño que era como una responsabilidad decir: 'Dios mío, qué suerte tengo'. Me he sentido tan querida que no tengo vida para agradecerlo", ha confesado.