La vida de Antonio Orozco (capítulo 5): su gran amor y el nacimiento de su hijo

Si en los primeros años del siglo XXI la música le sonreía, también lo hizo Cupido, que debía estar hasta emocionado por todos los temas que Antonio le estaba dedicando al amor. Para premiar esa fe en el romanticismo del mundo, le lanzó una de sus flechas e hizo que una joven, Susana Prat, se cruzara en su camino.

Fue su gran amor. Con ella se fue a vivir a un chalet adosado de 200 metros cuadrados en la localidad barcelonesa de Vallirana, compartió amor y sueños, y también un negocio de muebles, artículos y objetos decorativos para el hogar llamado Semilla del Silencio, un nombre que dio título al segundo disco del artista.

Quiso el destino que aquel trabajo incluyera el tema 'Devuélveme la vida', que escribió para pedirle perdón a una persona y que, al principio, Orozco había descartado. Menos mal que su productor le convenció, porque la canción se convirtió en su mayor éxito a partir del momento en que Miguel Nández y Cristie la interpretaron en la segunda edición de 'Operación triunfo'. "Ahí mi carrera se convirtió en una locura y cambió todo en mi vida", recuerda Antonio.

Fue un momento de gloria para el joven que, sin embargo, en medio de la satisfacción y la alegría por aquel despegue, no pudo evitar sentir como nunca la espinita que tenía clavada en el alma porque su padre no le estaba viendo triunfar. Por cierto, que otro gran espaldarazo para su música llegó cuando Iker Casillas le dedicó su tema "Estoy hecho de pedacitos de ti" a Sara Carbonero en las redes sociales tras declararle su amor en el Mundial de Sudáfrica del 2010.

Y llegó Jan para completar la felicidad de Antonio Orozco

Mientras su carrera iba creciendo, su historia de amor con Susana se consolidaba. Ella le inspiró, como nadie había hecho, con su espíritu reivindicativo y de lucha contra las injusticias, los engaños y las falsedades, y con una bondad y una alegría que alcanzaban a iluminar a todos los que estaban cerca de ella. Cuando, en el 2007, nació Jan, lo más bonito de su vida, el artista sintió que ya lo tenía todo.

El bebé era la prueba más grande de que su amor iba viento en popa, pero, poco después de la llegada del niño, en el 2008, la pareja decidió separarse sin que la ruptura cambiara los sentimientos de Antonio por Susana. "Mi hijo sacó de mí la poca vergüenza, pero es la viva imagen de su madre. Ella es un ejemplo; yo quiero ser como su madre, la amo, la adoro, la respeto y todos los días la miro como si fuese el último minuto que la voy a tener", declaró en una entrevista tras la separación.

Durante toda su carrera, Antonio no ha dejado de lado su labor solidaria... ¡Te la contamos en el próximo capítulo!