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Carmen Sevilla: la gran herencia que deja a su único hijo, Augusto Algueró Jr.

El hijo de Carmen Sevilla es también su heredero universal. Estos son los bienes con los que cuenta ahora

Carmen Sevilla y Augusto Algueró, en el funeral de Vicente Patuel.

María Alba

Décadas de trabajo siendo una estrella tanto en España como en Hollywood hicieron que Carmen Sevilla amasara un suculento patrimonio.

Aunque su vida no fue un camino de rosas y en ella hubo también algún que otro aprieto económico (en una ocasión tuvo que vender sus joyas), lo cierto es que la artista, que tenía fama de ser una persona muy generosa, supo gestionar sus ganancias con éxito para lograr que tanto ella como su hijo llevasen una vida de lo más acomodada.

La herencia de Carmen Sevilla tiene una peculiaridad: su hijo Augusto Algueró la recibió en vida, ya que como apunta Vanitatis, en 2014 este se hizo cargo de sus finanzas por poderes y, por lo tanto "no hay trámite alguno que hacer para la transmisión de su nada desdeñable herencia, amasada durante toda una vida de éxitos en la pequeña y en la gran pantalla", explica el citado medio.

Carmen y Augusto estaban muy unidos.

La gran fortuna que ganó Carmen Sevilla

La muerte de su segundo marido, Vicente Patuel, en el año 2000, supuso un punto de inflexión en la vida (y en las finanzas) de Carmen Sevilla. Ahí, la artista vendió su famosa finca de Extremadura y comenzó una nueva vida en Madrid, donde poco después empezaría a presentar 'Cine de Barrio'.

En la capital compró un lujoso piso de más de 200 metros cuadrados en la zona de Pintor Rosales, una de las más exclusivas de la ciudad. Además, al dividir su vida entre Madrid y Marbella, también contaba con una propiedad en la Costa del sol.

Respecto a su trabajo en TV, la folclórica cobró altísimos sueldos: dicen que en 'Telecupón' Carmen facturaba 300.000 pesetas de la época por cada programa, y por 'Cine de Barrio', ya en euros, ganaba 24.000 semanales. Sin duda, un importante colchón con el que pudo sufragar con creces sus gastos derivados de casi una década en una residencia.