El pasado 15 de octubre fue un día muy especial para Manuel Díaz, "el Cordobés". Para bien y para mal. Por un lado, se retiró de los ruedos taurinos después de varias décadas de éxitos continuos frente a los astados y, por el otro, sentía la pena de decir adiós a una profesión que se lo ha dado todo.Fueron varias las personas especiales para Manuel Díaz que compartieron con él una jornada histórica para el mundo de la tauromaquia. Estuvo su padre, Manuel Benítez; su madre, María Dolores; su esposa, Virginia, y sus tres hijos, Alba, Manuel y Triana. Su progenitor le cortó la coleta en medio del coso jienense de la Alameda, donde en su última corrida compartió cartel con Curro Díaz y el Fandi, y el resto acabaron derramando lágrimas por la emoción del instante.