El criminólogo que ayuda a la familia de Mario Biondo: "Sabemos quiénes estaban con él la noche que murió"

Desde que Mario apareciera muerto el 30 de mayo del 2013 en extrañas circunstancias, su familia está luchando para demostrar su tesis: que al joven lo mataron. Una sospecha que, ahora, acaba de ser confirmada por un juez de Italia.

Para saber en qué punto están las investigaciones, PRONTO ha contactado con Óscar Tarruella, el criminólogo que de forma altruista ayuda a la familia a esclarecer qué pasó aquella noche en el piso de Madrid en el que vivían Raquel y Mario.

Tarruella nos recuerda que las investigaciones de la empresa americana Emme Team concluyeron que la noche en la que murió Mario Biondo hubo dos personas en su casa "antes, durante y después de su muerte". Según Óscar, "ése es un dato muy importante porque apunta a que Mario no estaba solo. Como toda prueba presentada en un tribunal, tiene que ser ratificada y comprobada. Ya se ha puesto nombre y apellidos a esas dos personas que, supuestamente, estuvieron con Mario, y yo sé esos nombres. Pero, hasta que no lo demuestre Facebook, sería un atrevimiento que los nombres salieran de este informe".

Óscar: "Desde el primer día tuve claro que no era un suicidio"

Cuenta Tarruella que, paralelamente, "si bien esto no incrimina directamente a nadie, lo que hace es sembrar la duda de una serie de personas que deberían haber sido investigadas. Como en España el caso se cerró tan rápido, no se pudo investigar. Pasaron cosas dantescas, como que la familia hasta años después no consiguiera tener, aunque fuera desagradable, las fotos de la inspección ocular en el domicilio o las de la autopsia. Todo lo sucedido es terrible. A nivel judicial jamás se entregó el expediente completo".

También nos explica Óscar, indignado, que "se han abierto diligencias en contra del segundo forense italiano por irregularidades en su autopsia. No me digas que no es sorprendente que haya irregularidades en la primera autopsia, en la que el forense fue querellado, y que luego al segundo forense se le haya abierto un expediente porque las muestras que analizó no coincidían con la genética de Mario Biondo. Hay una corriente que no sé de dónde viene, que no quiere que esto se investigue. Incluso yo he recibido amenazas de muerte por investigar este caso".

"Te puedo decir -afirma el criminólogo- que pedí la colaboración de un forense muy prestigioso español y, cuando le envié todos los documentos y las fotos, me llamó una semana después de haber analizado todo con su equipo y me dijo: “Óscar, tienes razón, esto es un asesinato”. Pero no se atrevió a manifestarlo de forma pública. No tengo dudas de que la muerte de Mario fue un homicidio doloso o un asesinato con premeditación. Desde el primer día, yo tuve claro que no se trataba de un suicidio".

PRONTO: ¿Qué crees que va a pasar este otoño?

ÓSCAR TORRUELLA: Si se verifican ciertas informaciones habrá imputaciones. Si no se pueden determinar, se archivará. Yo tengo esperanza y creo que, si se archiva, no habrá justicia judicial, pero sí de otra forma.

P.: ¿Mediática, quizás?

Ó. T.: Exacto. Santina y su marido podrán publicar entonces todo lo que se ha descubierto en las investigaciones, porque las han pagado de su bolsillo. Con eso limpiarían la imagen de su hijo. El objetivo es devolverle la dignidad a una persona que tacharon de drogadicto, de depresivo y de prácticas sexuales desviadas.

Santina: "Nueve años de lucha para que se haga justicia contigo"

P.: ¿Cómo ves ahora mismo al matrimonio?

Ó. T.: A Santina la veo bien. Es una mujer muy fuerte, que siente que su hijo está con ella aunque no lo pueda abrazar. Quien a veces me preocupa mucho es el padre, porque es una persona introvertida, que llora hacia dentro. Veremos qué pasa, porque esto lo he observado mucho en homicidios: cuando ven que hay un desenlace es cuando las familias se quedan en un limbo emocional difícil de sobrellevar.

Con motivo del que hubiera sido el 40º aniversario, Santina usó las redes sociales para lanzarle un emotivo mensaje a su hijo en Twitter. "Hoy hubieras cumplido 40, mi amor. Quién sabe cuántos sueños hubieras realizado y cuántas satisfacciones nos hubieras dado. Hace ya nueve años que luchamos para que se haga justicia contigo y lucharemos hasta el final. Gracias, también, a todos aquellos que nos sostienen, esto es una manera de demostrarte todo nuestro gran amor hacia ti y estamos seguros de que te llegará hasta el cielo", decía esta derrumbada pero valiente madre, con la que Pronto también ha contactado.

PRONTO: Estos han sido días duros para vosotros. ¿Cómo lo lleváis? ¿De dónde sacáis fuerzas?

SANTINA D’ALESSANDRO: Toda fecha señalada, como puede ser el cumpleaños de Mario o las Navidades, es para nosotros como una espada que nos desgarra el corazón. Sentimos su ausencia con más fuerza. ¡Una madre nunca debería enterrar a su hijo! De aquel maldito 30 de mayo del 2013 sobrevivo, pero tengo que ser fuerte para hacerle justicia a mi hijo. El amor inconmensurable que siento por él me da fuerzas para luchar.

P.:¿Cómo de presente sigue Mario en vuestras vidas? ¿Es cierto que sueñas a menudo con él? ¿Cómo lo ves en los sueños y qué te dice?

S. D.: Muchas veces sueño con mi hijo, es ahí donde nos encontramos y en mis sueños siempre tengo la conciencia de que está muerto. Antes de tener las fotos de cómo lo encontraron, soñé muchas veces que Mario me decía: "Mamá, era una puesta en escena". No entendí ese mensaje hasta después de haber visto esas fotos. A menudo sueño con abrazarlo, ése es definitivamente el gran deseo que se refleja en mis sueños.

Santina: "Ahora, la última palabra la tiene el juez de instrucción"

P.: ¿Cuándo crees que el juez retomará el caso?

S. D.: En los últimos meses hemos presentado varios informes de investigadores y peritos que no dejan lugar a dudas de que Mario murió por intervención de terceros. Espero que por fin se investigue a la gente que, según creemos, están involucrados en el asesinato.

P: ¿Cómo crees que tendría que acabar todo para que encontréis la paz?

S. D.: Tener justicia es fundamental para mí y para mi familia. Ciertamente no podremos tener a Mario de nuevo, pero sí nos daría un poco de paz.