Daniel Sancho: así es su vida tras un mes en la nueva prisión
El joven Daniel Sancho ya ha superado las cuatro semanas en el centro de Surat Thani
Por protocolo sanitario, el joven Daniel Sancho tuvo que pasar una cuarententa anti-Covid.
Un día después de ser condenado a cadena perpetua, el pasado 29 de agosto, Daniel Sancho fue trasladado a la cárcel tailandesa la cárcel de Surat Thani, mucho más masificada y peligrosa que el centro en el había estado poco más de un año.
Daniel Sancho tiene las mismas condiciones que el resto de presos
Interior de la cárcel.
Después de pasar la cuarentena obligatoria para prevenir el COVID, Daniel Sancho fue llevado a un módulo de alta seguridad, lo que le permitió realizar videollamadas y recibir visitas. En su primer mes allí, el único familiar que lo ha visitado ha sido su madre, Silvia Bronchalo.
En la masificada cárcel de Surat Thani conviven 5.000 reclusos.
Aunque Daniel Sancho sigue en un módulo de adaptación con 14 personas más, se rige por las mismas condiciones que el resto de los 5.000 reclusos. El que fuera cocinero duerme en el suelo, sobre una delgadísima sábana. Para que le sea más fácil conciliar el sueño, ha solicitado una esterilla y unos tapones para los oídos. En los largos días de cautiverio, el joven invierte su tiempo en leer y escribir una novela sobre su propia historia.
Su madre Silvia Bronchalo junto a la cárcel, a la salida de una de sus visitas semanales.
Dispuesto a mantenerse en forma y gran aficionado al Muay Thai, deporte conocido también como boxeo tailandés, el hijo de Rodolfo Sancho ha pedido al consulado de España seis pares de guantes, además de los habituales protectores bucales, de pecho y de espinillas.
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