Duquesa De Alba: todos los famosos que se enamoraron de ella
Coincidiendo con el décimo aniversario de la muerte de la aristócrata, acaba de publicarse una biografía que revela que un príncipe estuvo enamorado de ella
Ana Polo.
Según la autora, “la duquesa hizo mucho para abrir España al exterior, trajo a muchas personalidades a nuestro país, como fue el caso de Jackie Kennedy, Grace Kelly, Audrey Hepburn y otros muchas personas relevantes”.
PRONTO.: Jackie y Grace eran enemigas íntimas.
ANA POLO.: La duquesa invitó a las dos a Sevilla y cuando coincidieron en la Casa de Pilatos, ni se miraron. Se odiaban. Aquello fue un momento muy incómodo delante de todo el mundo,
Portada del libro.
P.: Cuentas que Cayetana contribuyó muchísimo al regreso de la Monarquía a nuestro país.
A.P.: Sí. Y si hiciéramos una lista de las cinco personas que más trabajaron para el regreso de la Monarquía, su nombre estaría en ella. Los Alba se dejaron la piel en la lucha por la causa…
P.: ¿Qué destacarías de la personalidad de la duquesa?
A.P.: Que era una mujer sumamente libre y apasionada. Y muy leal a los suyos. Tenía una generosidad extrema, solidaria en extremo, colaboradora en proyectos sociales en favor de las clases más necesitadas. Estaba muy unida al pueblo llano.
La duquesa con Luis Martínez de Irujo.
P.: Uno de sus deseos incumplidos fue que pusieran en la lápida de su tumba la frase "Aquí yace Cayetana, que vivió como quiso”.
A.P.: Efectivamente. Estamos hablando de una mujer sin grandes ataduras y que hacía lo que le daba la gana. La frase ha quedado en el olvido…
P: En el libro dedicas muchas páginas a Luis Martínez de Irujo, su primer marido.
A.P.: Fue el gran amor de su vida y el padre de todos sus hijos. Un gran marido y un hombre que estuvo a la altura como duque de Alba. La persona que más impactó a Cayetana y la que más la ayudó en todo. Cuando Luis murió, su esposa cayó en una tremenda depresión, lo pasó fatal.
Jacobo Fitz-James, duque de Alba, el día de la boda de su hija.
P.: Era una mujer muy religiosa.
A.P.: Pero no hay que confundir religiosa con beata, aunque bien es verdad que la religión ocupaba un lugar importantísimo en su vida.
P.: Precisamente por esto lo pasaba muy mal cuando se divorciaban sus hijos.
A.P.: Sufría mucho. Porque para ella el matrimonio era una cuestión sagrada y para toda la vida. Cayetana enviudó dos veces, nunca se separó.
El torero Pepe Luis Vázquez fue el primer amor de la aristócrata.
P.: Las leyendas urbanas presentan a una Cayetana con muchos amantes…
A.P.: No me las creo. Su apoyo a la monarquía durante el régimen franquista le generó muchos enemigos que se dedicaron a propagar bulos para perjudicar a la duquesa. Intentaron dar una imagen de ella frívola y que no se ajustaba a la realidad. Eran difamaciones falsas, como decir que algunos de sus hijos no eran de Luis…
La duquesa con Antonio el bailarín.
P.: Se la llegó a relacionar sentimentalmente con Antonio el bailarín.
A.P.: Creo recordar que ese hombre era homosexual.
P.: ¿Quién fue su primer amor?
A.P.: El torero Pepe Luis Vázquez. Fue un amor de juventud, cuando ella tenía 16 años.
El príncipe italiano Aspreno Colonna quería casarse con ella.
P.: ¿Y Aspreno Colonna?
A.P.: Era un príncipe italiano riquísimo que se enamoró perdidamente de ella, es que la perseguía. Pero el padre de Cayetana tenía mucho miedo de que si su hija se casaba con ese hombre el título de los Alba quedase en segundo lugar. Y la relación se enfrió.
P.: Otro pretendiente: el duque de Alburquerque.
A.P.: Fue su profesor de equitación y ella le consideraba un hombre muy conservador, mientras que a Cayetana le gustaban más liberales, pero acabaron siendo muy buenos amigos.
Beltrán Osorio, duque de Alburquerque, era su profesor de equitación.
P.: La anécdota con el príncipe Ali Khan es muy curiosa.
A.P.: Ella estaba casada con Luis, y aquel hombre le mandaba flores todos los días. Era una falta de respeto a una mujer con marido, porque no dejaba de molestarla. Su obsesión por Cayetana era tremenda. Y tuvo que pararle los pies.
El príncipe Ali Khan la cortejó cuando Cayetana ya estaba casada con Luis Martínez de Irujo.
P.: ¿Sus matrimonios con Jesús Aguirre y Alfonso Díez fueron por amor?
A.P.: No sería muy ecuánime si tuviera que calificar al personaje de Aguirre, era un hombre muy difícil, creo que llegó a la vida de la duquesa cuando todavía estaba muy dolida por la muerte de Luis y necesitaba agarrarse a alguien. Y en el caso de Alfonso lo que buscaba era una buena compañía. Y tengo constancia de que a su lado fue muy feliz. Se demostraban mucho cariño.
La duquesa con su último marido, Alfonso Díez.
P.: Era una madre muy estricta.
A.P.: A pesar de ser una mujer muy liberal había sido educada de una manera determinada en la que el orden y la obediencia eran vitales. Se crió al amparo de una nanny…
P.: Pero en su infancia era muy traviesa.
A.P.: Mucho, en una ocasión le dijo a su cuidadora que o le compraba una peluca o le diría a su padre que se portaba muy mal con ella. Y se paseaba por las calles de Londres con el postizo. Y otra vez, durante un viaje a Egipto, cogió una manta, se la puso sobre la cabeza y se dedicó a pedir limosna en plena calle.
La duquesa con su hija Eugenia Martínez de Irujo.
P.: Se ha hablado mucho de la relación de la duquesa con la reina Isabel II. Y no fue tan cordial como la pintan.
A.P.: Es que tenían caracteres muy distintos. Isabel era más bien tímida y Cayetana un torbellino. La duquesa se llevaba mejor con la hermana de la reina, la princesa Margarita.