Emilio Aragón: "Me emociona que se sigan escuchando las canciones de mi padre"
Está de nuevo al frente del programa "B.S.O.", que, en su segunda temporada, tiene invitados de lujo, como Antonio Banderas o Lolita
Después de casi 15 años lejos de las cámaras, una llamada durante el confinamiento desde Movistar+ y una propuesta para que hiciera lo que quisiese empujaron a Emilio Aragón a volver por fin a la tele. Y lo hizo a lo grande, con su programa “BSO”, del que acaba de estrenar la segunda temporada.
Y precisamente la presentación de la nueva temporada tuvo lugar en Vitoria, en el FesTVal, donde Emilio mostró su ilusión por este formato. “Voy a cumplir 63 y creo que me quedan unos diez añitos de trabajo, y puedo aprovecharlos. Los que amamos la televisión echamos de menos un programa de música en directo”, dijo Aragón, que dejó claro que está en una etapa de la vida en la que sólo le apetece “hacer cosas bonitas”.
Está preparando su tercera película
PRONTO: Has dicho que te quedan diez años de trabajo, ¿tienes claro que ahí está tu fecha tope de retiro?
EMILIO ARAGÓN: Sí, pienso que con 73 años todavía tendré fuelle, pero no tanto como el que aún tengo. El problema de esta profesión es la demanda y el tiempo y las horas. Regresar a la tele implica horas sin dormir, porque yo, cuando me remango, voy. Y si voy, voy con todas. Cuando terminé la primera temporada tardé mucho tiempo en descomprimir.
P.: Hasta que llegó este programa, desde que decidiste dejar la tele, ¿cuántas veces has dicho que no a propuestas para ponerte de nuevo frente a las cámaras?
E.A.: Muchas. Es que tuve que tomar esa determinación porque, si no, no hubiese podido escribir, dirigir ni hacer nada. Y cuando puedes hacer compatible escribir el guión de una película y componer y todo lo demás, porque puedes trabajar en casa o en una oficina, luego es difícil salir de esa rueda porque te vienen los recuerdos de las largas horas en los platós y no te apetece volver a ello. Pero sí, hubo intentos. La verdad es que ha sido por la pandemia. Muchos nos hemos preguntado durante los meses de confinamiento que qué iba a pasar, que hacia dónde vamos y, en ese momento existencial, en casa me dijeron que por qué no abría un paréntesis en mi vida, hacía el programa y luego ya seguía escribiendo.
P.: ¿Y es un paréntesis o algo más?
E.A.: No se puede decir “de este agua no beberé”, pero si hago algo más sería otro “B.S.O.”. Me gustaría seguir con los proyectos que tengo de ficción. Hay también una comedia musical, un espectáculo para Navidades, sobre mi padre, que se estrena el 12 de noviembre, y hay cosas que puedo hacer sólo si estoy detrás de las cámaras. Si estoy delante, es imposible.
P.: ¿Tienes pensado dirigir algún nuevo largometraje?
E.A.: Sí. De hecho, es uno de los proyectos que tenía encima de la mesa y que he tenido que parar para hacer “B.S.O.”. Se está retrasando. Pero sería mi tercera película, la que serviría como una declaración de intenciones, porque será, si no la peli que yo quiero hacer, una de las que quiero hacer.
Homenaje a su padre, el gran Miliki
P.: Respecto al homenaje a tu padre, ¿cómo será?
E.A.: Hace dos años dos chicos me estuvieron persiguiendo para que hiciéramos algo juntos y me ofrecieron hacer Circ Classic. Llegaron a pasar un millón de personas. Y me han pedido que haga una segunda función, una función dedicada a mi padre que se estrena el 12 de noviembre. Ahora estamos en pleno jaleo.
P.: ¿Te sorprende que sus canciones sigan teniendo tanta vigencia en las nuevas generaciones?
E.A.: A mí me emociona. El otro día un amigo mío de Bilbao estaba con sus nietas y paró delante de casa con el coche y estaban escuchando unas de las canciones de mi padre por la radio. Si mi padre viviera, se emocionaría. El otro día un amigo director de fotografía e iluminación me contó una cosa que me llegó al alma, porque estoy hecho un moñas terrible… Me explicó que su madre tiene Alzheimer y ya no le reconoce, pero que cuando él le canta “Hola, Don Pepito”, ella le contesta “Hola, don José”. Él habla con ella a través de la canción. No hay cosa más hermosa que eso.
¡Te dejamos aquí esa mítica canción de Miliki!