Francisco: sus decisiones más polémicas en sus 10 años como Papa
Jorge Mario Bergoglio fue elegido el 13 de marzo del 2013. Desde entonces, sus actos y palabras han evidenciado que es un papa revolucionario
El Papa Francisco tiene 86 y lleva una década de pontificado.
Después de que Benedicto XVI anunciara su decisión de renunciar al papado, el cónclave para elegir a su sucesor empezó el 12 de marzo del 2013 y a las 19.05 horas del día 13 ya hubo fumata blanca. Pocos minutos más tarde, el hasta entonces cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio, de 76 años, se presentó ante el mundo como Francisco, haciendo historia desde el primer momento, ya que fue el primer americano y el primer jesuita en convertirse en Papa.
Con sus primeras palabras, Francisco ya dio muestras de su carácter y de la simpatía que le haría ganarse la admiración de muchos. "Como sabéis, el deber de un cónclave es dar un obispo a Roma. Parece que mis hermanos cardenales han ido a buscarlo casi al fin del mundo...pero estamos aquí", manifestó.
En su primera aparición ante los fieles como Papa, Francisco bromeó comentando que los cardenales habían ido a buscar un pontífice "casi al fin del mundo".
Siempre al lado de los más vulnerables
Acaba de cumplirse el décimo aniversario de la elección de Francisco, una década en la que las acciones de Jorge Mario Bergoglio han dejado bien claro cuáles son las claves de su pontificado.
Viajes significativos. El 8 de julio del 2013 realizó su primera salida fuera de Roma como Papa y el destino elegido fue Lampedusa, isla en la que quiso rendir homenaje a los cientos de personas que perdieron la vida intentando llegar a Europa. Muy sensibilizado con esta dura realidad, meses después, pidió ante el Parlamento Europeo que no tolerara que "el Mediterráneo se convierta en un gran cementerio".
En estos 10 años, Francisco ha realizado un total de 40 viajes al extranjero y ha priorizado acudir a países donde el catolicismo no es dominante o incluso está perseguido.
Francisco besando a un niño en Lampedusa en el 2013.
Apoyo a los colectivos vulnerables. "El momento más hermoso de mi pontificado fue la audiencia con los abuelos en la plaza San Pedro en el 2014", ha asegurado Francisco. Además de dar protagonismo a los mayores, Francisco también ha querido estar al lado de los pobres. Él mismo ha participado en comidas con personas sintecho organizadas en el Vaticano y, a nivel institucional, creó la Jornada Mundial de los Pobres, que se celebró por primera vez en el 2017.
Dispuesto a tomar medidas contra la pederastia en la Iglesia
Francisco bromeando con el entonces presidente Obama.
Histórica relación con otras religiones. Cuba fue el escenario en el año 2016 del encuentro entre el papa Francisco y el patriarca ortodoxo ruso Kiril. Hacía 1.000 años que los dos máximos representantes de sus respectivas Iglesias no se reunían.
En el 2021, durante su viaje a Irak, el Pontífice se entrevistó con el ayatolá Alí Al Sistani, principal líder religioso chií, un hito histórico en las relaciones entre el Vaticano y el Islam.
Su histórico encuentro con el patriarca ortodoxo Kiril.
Lucha contra la pederastia en la Iglesia. Dispuesto a tomar medidas contra una lacra que llevaba años ocultándose, en el 2019 el Papa ordenó eliminar el secreto pontificio en los casos de abusos a menores. Además, el Vaticano creó un equipo de expertos para orientar a las iglesias locales sobre el protocolo a seguir para denunciar estos delitos.
Sus lágrimas por las víctimas de la guerra de Ucrania
Rechazo al horror de la guerra. En la primera entrevista concedida tras cumplir sus 10 años de pontificado, Francisco ha señalado que los momentos más dolorosos de este tiempo coincidieron con la visita a los cementerios militares de Redipulgia y Anzio, donde están enterrados soldados fallecidos en la I Guerra Mundial, y la conmemoración del desembarco de Normandía, ocurrido en la II Guerra Mundial. Al Pontífice también le ha afectado enormemente la guerra de Ucrania y se le ha podido ver llorando por las víctimas de ésta.
Francisco en Canadá, donde pidió perdón a los indígenas.
Abre la puerta al fin del celibato en la Iglesia. Aunque asegura que declararlo obligatorio o no es una tarea que le corresponderá a otro Papa, recientemente Francisco se ha mostrado convencido de que "no hay ninguna contradicción para que un sacerdote se pueda casar. El celibato en la Iglesia occidental es una prescripción temporal".