Hablamos en exclusiva con El Cordobés, que cuida a su madre enferma: "Disfruto a lo grande teniéndola conmigo"
Tras emocionarse en el pregón que dio en Córdoba contando el estado de salud de su madre, hablamos con el diestro para que nos aclare cómo se encuentra su progenitora
El Cordobés, criado por los padres de su madre
El Cordobés dando un discurso.
Durante el discurso que realizó, del que estuvieron muy pendientes su mujer, Virginia Troconis, y su progenitor, el torero destacó el profundo amor que siente por sus padres, especialmente por su madre, María Dolores Díaz González, a quien dedicó unas bonitas palabras debido al delicado estado de salud por el que pasa.
“En el mejor momento de mi vida, cuando tengo más tiempo para compartir, cuando mi madre está más tranquila porque su hijo ya no se tiene que jugar la vida, pues se me ha puesto un poquito malita”, explicó El Cordobés, emocionado.
La de María Dolores es una historia de una madre totalmente entregada, que siempre ha recibido el amor de Manuel (con él en la foto) y de sus otros hijos, que la quieren con locura.
La relación de Manuel con su madre es un ejemplo de cariño y admiración recíprocos, algo que el diestro siempre ha manifestado cuando ha hablado de su progenitora. No cabe la menor duda de que estamos ante una madre coraje, ya que María Dolores Díaz no sólo ha sido un apoyo fundamental en la vida del torero durante los años de lucha para ser reconocido como hijo de Manuel Benítez, sino también en tirar para adelante para poder darle a él y a sus hermanos la mejor vida posible.
En este enlace te lo contamos todo sobre María Dolores Díaz, la madre de El Cordobés, que le enseñó a amar y a perdonar.
Una tierna imagen de la madre de El Cordobés de joven.
Y es que María se quedó embarazada de Manuel Benítez con apenas 20 años, una situación que llenó de vergüenza a los padres de ella, que la echaron de casa. Sola y embarazada, ya que Benítez se desentendió del bebé, alquiló una habitación que apenas podía pagar.
Pero al poco de nacer Manuel, madre e hijo se volvieron a instalar en casa de los padres de ella, que decidieron acogerla de nuevo para ayudarla en la crianza de su nieto. “Eran gente trabajadora. Comíamos todos los días, pero no había para ningún lujo”, ha recordado Díaz en alguna ocasión.
María Dolores educó a su hijo desde el respeto hacia su padre ausente
El Cordobés, besando a su madre.
Tiempo después, cuando Manuel tenía 4 añitos, su madre contrajo matrimonio con el delineante José Oñate, con quien se mudó a Córdoba, y con el que tuvo cinco hijos más. Una relación que, al cabo de los años, acabó por romperse.
Durante todo ese tiempo, María no sólo estuvo al lado de Manuel en su deseo por dedicarse a la tauromaquia, sino en conseguir que Benítez lo reconociera como su hijo.
“Las angustiosas estrecheces económicas le hicieron desde muy niño cargar la responsabilidad de ser él quien evitara la pobreza de todos los suyos, y la decisión de resarcir el honor de su madre”, cuenta Jaime Royo-Villanova en "Manuel Díaz, 'el Cordobés': De frente y por derecho".
Además, María Dolores nunca tuvo una mala frase contra Benítez y educó a Manuel desde el respeto hacia el padre ausente.
En el pregón que dio Manuel no faltó su padre, Manuel Benítez, que subió al escenario a abrazar con cariño a su hijo.
Los dos Manueles son, en estos momentos, uña y carne, un logro en el que María Dolores ha sido pieza esencial. Y consciente del importante papel que su madre ha tenido en su vida, ahora que ella le necesita, no ha dudado en volcarse en su cuidado, algo que nos cuenta en exclusiva a tu Revista Pronto. “Me siento muy feliz porque tengo en casa conmigo a mi madre, está en el campo, en mi finca. Es una mujer fuerte, enorme, tranquila, y se encuentra recuperándose de un problemilla de salud”, explica Manuel Díaz El Cordobés.
“Es una madre coraje, un ser excepcional”
María, durante su única aparición en televisión, en el 2023, enviando un tierno mensaje a su hijo en ‘El musical de tu vida’.
PRONTO: ¿Qué le ha ocurrido exactamente a tu madre?
MANUEL DÍAZ: Hombre, ya tiene 76 años y sufre sus achaques. Está un poco pachucha. Los años no pasan en balde. Se ha tirado toda su vida trabajando y cuidando a todos sus hijos. Es una madre coraje, un ser excepcional. Como te digo, ha parido mucho y está algo delicada de los huesos. Sufre dolores óseos porque creo que el calcio nos lo hemos llevado sus hijos. Pero está fenomenal, lo único es que también está delicada de las caderas y le ponen infiltraciones para mitigar los dolores de las articulaciones y de la columna. Al margen de esto, todo bien.
“Los fines de semana los pasamos todos en casa, felices, disfrutando con ella de la vida”
Los hijos y la mujer de Manuel están felices de vivir con María.
P.: Y gozando de su compañía en la finca, ¿verdad?
M.D.: ¡Te lo puedes imaginar! Disfruto a lo grande teniéndola conmigo. En este sentido, soy inmensamente feliz. Es una gran madre y mi familia y yo estamos gozando de su compañía.
P.: También es una abuela entregada a sus nietos.
M.D.: Mucho. Se lo pasa muy bien con mis hijos, les quiere con locura. Es una abuela ejemplar. Y mis hijos la adoran. Todos la mimamos muchísimo, estamos pendientes de todo lo que le ocurra. Los fines de semana los pasamos juntos en casa, felices, disfrutando con ella de la vida y atendiéndola con cariño. Creo que empieza a hacerse de rogar, ja, ja, ja.
P.: ¿Tiene muchos dolores?
M.D.: Bueno, los problemas de huesos son incómodos. Los dolores no son muy fuertes, pero están ahí.
“La vida me sonríe en todos los aspectos”
Virginia ha sido siempre un gran apoyo para su marido.
Finalmente, el destino ha sido justo y, a día de hoy, Manuel Díaz es un hombre que se siente inmensamente feliz. “No puedo pedir más. Mis hijos crecen felices, tengo una madre y una esposa maravillosas, mi trabajo en el programa de Ana Rosa Quintana me satisface mucho, mis negocios funcionan a la perfección... La vida me sonríe en todos los aspectos. ¿Qué más puedo pedir?”, manifiesta el popular matador de toros.