Laura Matamoros habla de su enfermedad que podría dejarla ciega
La hija de Kiko Matamoros ha compartido el miedo que tiene a que su enfermedad de la vista le afecte tanto como a su padre
Laura Matamoros está muy preocupada por el futuro de su vista.
Hace tres años, Laura Matamoros sorprendió a sus seguidores al hablar por primera vez sobre su enfermedad ocular, un diagnóstico que ha cambiado su vida. La hija de Kiko Matamoros reveló en redes sociales que sufre glaucoma de baja tensión, una enfermedad hereditaria que ya ha afectado a su visión y podría llegar a dejarla ciega.
Este problema comenzó a manifestarse en 2019, cuando Laura empezó a notar unas extrañas vibraciones en el ojo y molestias que empeoraban durante los vuelos en avión, lo que la llevó a acudir al oftalmólogo para una revisión. En una reciente publicación, la influencer ha explicado los desafíos a los que se enfrenta día a día y cómo este diagnóstico ha aumentado sus temores sobre su salud visual.
Laura Matamoros: "De la mitad del ojo para abajo apenas tengo visión"
Laura teme tener el mismo problema que su padre, Kiko Matamoros.
"Los que me seguís desde hace años sabéis que tengo glaucoma en el ojo derecho. Es la pérdida de visión del nervio óptico, que se va oprimiendo y deja el ojo sin visión poco a poco", ha explicado la influencer.
"Tengo dañado el nervio óptico, veo muy poquito y de la mitad del ojo para abajo apenas tengo visión", ha también confesado Laura Matamoros, añadiendo que teme perder la vista de manera progresiva, igual que le ha sucedido a su padre. Este miedo la ha llevado a evitar algunas revisiones, admitiendo que "a veces prefiero no ir por temor a los resultados".
Diego y Laura Matamoros están muy unidos.
En su última visita al oftalmólogo, Laura Matamoros no estuvo sola. Su hermano, Diego Matamoros, la acompañó en este momento tan delicado, brindándole el apoyo que necesitaba, algo que no dudó en agradecerle públicamente en sus redes.
Laura Matamoros.
Afortunadamente, la última revisión ha dado un respiro a Laura Matamoros y a su familia. Desde las stories de Instagram, la influencer compartió su alivio tras conocer los resultados de la consulta. “Gracias a Dios, todo sigue en orden. Veo un poco menos, pero lo más importante es que el nervio óptico está bien”, anunció emocionada. Aunque su visión ha empeorado ligeramente, el progreso de la enfermedad parece haberse ralentizado, permitiéndole recuperar algo de tranquilidad.