No hay día que Maite Galdeano no acapare algún titular en la prensa del corazón o sea protagonista de alguna imagen en la pequeña pantalla desde que su hija, Sofía Suescun, la echó de casa el pasado mes de agosto. No ha levantado cabeza tras el suceso. Ha intentado de todo para regresar a su hogar, incluso una mediación de un psicólogo para que las ayudase a resolver el problema. Pero nada ha funcionado.