Manel Dalgó: "Isabel Pantoja no es tonta"
El famoso transformista fue el responsable de que la tonadillera asistiera al evento monegasco
Manel es muy querido por la familia real de Mónaco. En la foto, con Isabel y Shirley Bassey en la glamurosa gala benéfica.
Aunque en muchos medios aparece como un amigo entrañable de Isabel Pantoja, el hombre que le consiguió la invitación para el Baile de la Rosa monegasco, Manel Dalgó, confiesa a nuestra revista que "no somos amigos. Nos conocimos el día del baile y no nos hemos vuelto a ver". Este icono del transformismo está considerado un referente del colectivo LGTBI+ galo y es muy bien recibido por la familia real de Mónaco.
"Isabel quería conocer a Shirley Bassey"
PRONTO: ¿Por qué se habla de una entrañable amistad con Isabel si no os habíais visto en la vida?
MANEL DALGÓ: No lo sé, porque no la conozco de nada. Ni tan siquiera soy fan de ella, aunque me gusta como canta.
P.: Entonces, ¿qué sentido tenía invitarla?
M.D.: Contactó conmigo su representante para pedirme que la invitara porque quería conocer a Shirley Bassey, que es íntima amiga mía. Y senté a las dos conmigo en la misma mesa. Hablaron de grabar una canción juntas.
P.: ¿Que impresión te causó?
M.D.: Es una mujer muy cercana y cariñosa. Nos mandamos mensajes de vez en cuando.
Alberto de Mónaco junto a Manel Dalgó.
"No creo que se deje manejar por su hermano"
P.: ¿Y qué opinas de su hermano, Agustín?
M. D.: Es muy majo, educado, cariñoso, agradecido…
P.: ¿Conoces el paso de la tonadillera por la cárcel?
M.D.: Sí, pero quien me importa es la artista. Y tonta no es, no creo que se deje manejar por su hermano.
P.: Dicen que tenía la obsesiva intención de conocer a la princesa Carolina.
M.D.: Y la conoció de pasada. Cuando se marchó del acto le dimos las gracias y nos contestó con un movimiento de cabeza.
"Estefanía y yo tenemos buena sintonía "
Manel besando a Estefanía de Mónaco.
P.: Con quién tienes mucho contacto es con Estefanía.
M.D.: Colaboro con la princesa en su fundación contra el sida. Tenemos buena sintonía.
P.: Parece más abierta que su hermana Carolina.
M.D.: Sí.
P.: ¿Y el príncipe Alberto?
M.D.: Es un hombre muy agradable y cercano. Más llano que muchas de las petardas que viven en Montecarlo, ésas que tienen cuatro duros y miran a la gente por encima del hombro.
P.: ¿Tienes trato con su esposa, Charlene?
M.D.: No, la conozco de vista.
P.: Triunfaste en Europa, pero en España no se reconocieron tus méritos.
M.D.: En este país el deporte nacional es la envidia. Ahora sigo vinculado a este mundo, llevando la parte artística de un club de Maspalomas.