María Teresa Campos: su mansión, que acaba de vender, se convertirá en una empresa de zapatos

María Teresa Campos despide el verano de la mejor manera posible: habiéndose deshecho de la casa que llevaba años intentando vender y mudándose a un coqueto piso en el mismo edificio que su hija Terelu. El pasado 7 de septiembre fuimos de los primeros en contarte que la veterana periodista había vendido, por fin, su lujosa mansión de Molino de la Hoz, pero ahora la pregunta es ¿a quién?

La mansión de María Teresa Campos llevaba mucho tiempo a la venta, y salió al mercado con un precio inicial de cuatro millones de euros. Al ver que esa cifra era algo abultada para las cantidades que se piden hoy día por viviendas similares, la malagueña se vio obligada a ir rebajándola poco a poco hasta que, finalmente, ha llegado a un acuerdo de compraventa por un total de 2,5 millones de euros. 

¿Quién es el comprador de la casa de María Teresa Campos?

Mucho se ha hablado del (hasta ahora) anónimo comprador de la mansión: primero se habló de un millonario mexicano, luego de un fondo de inversión... ¡incluso se dijo que Kiko Matamoros estaba interesado en hacerse con ella! Pero nada de eso...

El pasado 10 de septiembre tuvo lugar la firma de un contrato de arras a través del cual el empresario José Gil le pagó un adelanto de 100.000 euros a María Teresa Campos. Gil es el dueño de la firma de calzado española Alma en Pena, una de las que más proyección de crecimiento está teniendo en los últimos años. Y justo por eso, la marca necesitaba un espacio en condiciones para establecer una nueva base de operaciones. 

Dentro de las paredes de lo que hasta ahora ha sido la mansión de la presentadora se establecerán las nuevas oficinas de Alma en Pena, según informa el diario ABC: "será su centro digital y de imagen de la firma que engloba el desarrollo de ventas internacionales, colecciones y todo el sector de venta online", explica el citado medio. La intenciones de Gil es que estas nuevas oficinas ubicadas en la famosa mansión estén operativas justo antes de Navidad. 

La casa de María Teresa Campos sufrirá notables cambios

Tal y como cuenta ABC, los nuevos propietarios no tienen intención de hacer cambios demasiado sustanciales: no se tirarán tabiques y la disposición del interior de la vivienda se mantendrá como hasta ahora, pero sí se acondicionará todo para que trabajen casi 20 personas. "Desaparecerán las enormes cortinas, los telares y alfombras", afirma el diario. 

A finales de este mes José Gil ya tendrá las llaves de su nueva y flamante mansión, desde donde espera que su firma crezca cada vez más. Por su parte, María Teresa Campos, comenzará una nueva vida sin la carga económica que supone mantener una edificación de esas características, más cerca de su hija Terelu con un nuevo piso que llenar de nuevos recuerdos.