Vitalista y enérgico, nada le hace perder su alegría. Y eso que nuestro querido Mario Vaquerizo está pasando por uno de los momentos más duros de su vida desde que hace tres meses le diagnosticaran en la espalda una artrosis degenerativa que lo ha dejado postrado en cama casi un mes, sufriendo grandes dolores y minando su arrolladora personalidad. «El dolor minó mi personalidad, dejé de ser yo».
Ahora, más recuperado, el marido de la singular Alaska ha hablado con nuestra revista durante su presentación como nuevo «pelo Pantene», donde, afortunadamente, hemos visto a un Mario de nuevo divertido y alocado, mucho más recuperado. «El proceso de recuperación es duro, ya no tanto por los dolores físicos, sino por una cuestión mental. Sabéis que soy una persona muy vitalista, me gusta estar en todos los sitios y hacer gimnasia, y me he visto imposibilitado. He perdido la forma física, llevo tres meses sin ir al gimnasio y he tenido que dejar a mi entrenador, Julito, y ponerme en manos de expertos. Pero esta enfermedad, afortunadamente, no es tan grave como otras», nos ha explicado.