Mario Vaquerizo: "Mi suegra y yo sacamos de quicio a Alaska"
El polifacético artista participa en un nuevo concurso donde está prohibido reírse y prepara disco y gira con las Nancys Rubias
El marido de Alaska, Mario Vaquerizo, es un profesional muy polifacético. Estudió periodismo y, aunque era muy conocido por los profesionales del sector, no fue hasta el exito del reality "Alaska y Mario" cuando su popularidad creció como la espuma, llegando incluso a eclipsar la de su mujer.
Con una exitosa trayectoria, se apunta a lo que le echen y siempre con la sonrisa por bandera. A pesar de sufrir un duro episodio personal (su hermano Ángel murió en un accidente de moto hace 15 años, cuando el joven tenía 32) y serle detectada una artrosis crónica, no pierde la sonrisa y contagia su alegría a los que le rodean.
Hablamos con Mario del nuevo programa en el que participa, "LOL: si te ríes, pierdes", un concurso en el que nueve reconocidos humoristas españoles deberán contener la risa para evitar ser expulsados, y de otros proyectos profesionales.
"Me río desde que me levanto"
PRONTO: Mario, ¿cuánto cuesta contener la risa?
MARIO VAQUERIZO: ¡Mucho! Para mí ha sido todo un reto, porque yo me río desde que me levanto, y no hacerlo es como dejar de hablar. Además, cuanto mayor es la complicidad que tienes con alguien, peor lo pasas y más temes acabar riéndote. Estableces un lenguaje que te puede llevar fácilmente a la risa, aunque el código Vaquerizo es muy difícil de entender, ja, ja, ja.
P.: ¿Qué técnicas has utilizado para evitar la risa?
M.V.: Mi estrategia era acusar a todo el mundo y decir: "Te has reído". Así intentaba descolocarlos y desviar la atención, ja, ja, ja.
Mario es uno de los muchísimos famosos que ha caído rendido ante los gazpachos de Belén Esteban:
Mario va a sacar un libro de reflexiones espirituales
P:¿Qué otros proyectos profesionales tienes a la vista?
M.V.: Soy una mariquita inquieta y me gusta hacer de todo. Sigo en la radio, en Los 40, estoy terminando de grabar un disco con las Nancys Rubias, con quienes me iré de gira, y me han ofrecido dos programas de televisión. También voy a escribir un nuevo libro, de reflexiones religiosas y espirituales, con Fabio McNamara, a quien admiro profundamente. Soy su biógrafo oficial, algo que para mí es un regalo.
P.: También debe de serlo tener una suegra que está tan bien a los 92 años.
M.V.: América es maravillosa, nos llevamos muy bien. Yo he tenido la suerte de encontrar a una mujer como Alaska y a una suegra como ella. América es como yo: sacamos de quicio a la Olvi. Mi suegra y yo afrontamos la vida con inteligencia emocional.