Miguel Bosé a los 66 años: su intensa y polémica vida
El cantante, que ha protagonizado polémicos momentos en los últimos años, empezó su carrera artística siendo adolescente y ha experimentado una gran evolución desde sus inicios
El primogénito del torero Luis Miguel Dominguín y de la actriz y "exMiss Italia" Lucía Bosé vino al mundo en Panamá porque los compromisos profesionales de su padre lo habían obligado a desplazarse hasta allí. Cuando el bebé contaba sólo con 15 días, la familia regresó a España, donde, el 12 de julio, Miguel fue bautizado por todo lo alto, siendo su padrino el director italiano Luchino Visconti.
El ambiente en el que se movían sus progenitores provocó que, desde su más tierna infancia, el niño estuviera acostumbrado a vivir rodeado de caras conocidas. Un personaje muy presente en su vida fue Pablo Picasso. Con él, Miguel y sus hermanas menores, Lucía y Paola, compartieron numerosas jornadas. "Nuestra relación con Picasso fue absolutamente particular. Nos enseñó muchísimas cosas, pero sobre todo, a desarrollar la imaginación", recuerda.
La separación de sus padres lo empujó a trabajar
Por decisión de sus padres, estudió en el Liceo Francés, uno de los pocos colegios laicos que existían aquellos años en Madrid. En su etapa escolar, Miguel se sintió especialmente atraído por la biología y, durante largo tiempo, soñó con ser oceanógrafo. En casa era un niño bastante travieso.
"Siempre fui un poco rebelde. La única persona capaz de meterme en vereda era mi hermana Lucía y yo, por venganza “pinchaba” a la pequeña, Paola, que era la eterna víctima de mis travesuras", ha afirmado. Muy unido a su madre, Miguel recuerda que, de pequeño, su padre le inspiraba cierto temor.
Este sentimiento fue diluyéndose después de que, en 1968, sus progenitores comunicaran a sus hijos la decisión de separarse. "Con la obligación de verlo dos veces por semana, empecé a conocerle y a quererle", confesó. Algo que desmintió en su reciente autobiografía, donde relata los momentos más duros vividos junto a su progenitor.
Poco tiempo después de la ruptura se hizo evidente que el dinero que Dominguín le pasaba a su ex no era suficiente para que ésta costeara todos los gastos de sus hijos, por lo que Miguel se propuso ponerse a trabajar y ganar dinero con el que ayudar en casa.
Con 16 años y tomando para su nombre artístico el apellido de su madre, Miguel Bosé debutó en el cine en el filme "Los héroes millonarios" en el que trabajó con actores como Rod Taylor y Rod Steiger. Un año después, rodó "Vera, un cuento cruel". Cuando terminó el bachillerato sopesó la idea de marcharse a Bruselas para estudiar danza, disciplina por la que se sentía muy atraído, pero, finalmente, puso rumbo a Londres. Sin la ayuda económica de sus padres, en la capital británica tuvo que trabajar como camarero para pagarse el alojamiento.
De nuevo en Madrid, Miguel aceptó trabajar como ejecutivo de marketing en los negocios de su padre, que había abandonado el toreo. La experiencia no le gustó y, a pesar de que su progenitor le había dejado claro que no veía con buenos ojos que se dedicara a la interpretación, el joven volvió al cine tomando parte en las películas "Garofano rosso" (1976), "Retrato de familia" (1976) y "Peregrina de hombres" (1977).
En aquellos años, Camilo Sesto lo animó a probar suerte en el mundo de la música y el joven aceptó. En 1977 salió a la venta su primer disco con un tema "Linda", que enseguida se situó en los primeros puestos de la lista de éxitos.
A pesar de la popularidad de la que empezó a gozar, el cantante no desechó la idea de dedicarse a la danza, para lo cual se marchó a Nueva York a formarse. Tras un tiempo allí, en el que coincidió con Nacho Duato, optó por seguir en la música y dejar de lado sus aspiraciones como bailarín.
La ambigüedad de un ídolo de quinceañeras
La decisión de volcarse en su carrera como cantante coincidió con el lanzamiento, en 1979, de un tema que afianzó su éxito: "Super superman". Los movimientos que realizaba Miguel cuando bailaba la coreografía de esta canción pegadiza hizo que levantara suspiros entre el público femenino al mismo tiempo que, en algunos medios, se especulara con su condición sexual.
Un año después, conseguía incrementar todavía más su número de incondicionales fans tanto en España como en Latinoamérica con "Don Diablo". En una de sus estancias en México, el artista apadrinó profesionalmente a la cantante Daniela Romo, con la que se lo relacionó sentimentalmente, sin que ninguno de los dos hiciera declaraciones al respecto.
Cansado de que se le etiquetara como un cantante para quinceañeras, Bosé dio un nuevo giro a su carrera musical con el disco "Bandido" (1984). Además del cambio de estilo, el cantante sorprendió con la vestimenta elegida para sus actuaciones: una falda pantalón.
De nuevo, Miguel vio cómo se cuestionaba su orientación sexual, un hecho que nunca le ha importado. "Sostengo que un auténtico hombre no es el que se lleva a la cama a 1.000 mujeres, sino aquel que es capaz de dialogar con la mujer que lleva dentro de sí", ha dicho. Muy celoso de su intimidad, ha hablado en contadísimas ocasiones de su vida sentimental. Una de ellas fue para referirse a los rumores que lo vinculaban sentimentalmente con Ana Obregón. "Con Anita me llevo muy bien. Pasamos cuatro años juntos, muy juntos. Si nuestra relación hubiera durado un poco más quizá me habría casado con ella", aseguraba en 1986.
Rumores sobre una grave enfermedad que no existía
A pesar de que estaba centrado en su faceta musical, Miguel no dejó su carrera como actor que, en 1991, vivió uno de sus momentos cumbres cuando rodó "Tacones lejanos" con Pedro Almodóvar, interpretando a un transformista.
Pocos meses después saltaban todas las alarmas cuando empezó a comentarse que el artista había sido ingresado de urgencia aquejado de una grave dolencia. Según algunas fuentes, padecía sida y otras voces apuntaban a una sobredosis de droga. Nada más lejos de la realidad.
"No sé quién ha podido inventarse esa historia. Estoy perfectamente bien, trabajando con normalidad", declaraba Bosé desde Francia donde estaba rodando una película.
Otro duro revés llegaba a la vida del cantante el 8 de mayo de 1996 cuando su padre, Luis Miguel Dominguín, fallecía repentinamente a causa de un derrame cerebral. "Estoy enfadado con él, porque se fue en el mejor momento de nuestra amistad" , aseguró Miguel, quien, tras años de acusadas diferencias con su progenitor, había hecho las paces con él poco tiempo antes.
Como el torero, Bosé sentía pasión por el campo y los animales, lo que le llevó a embarcarse en un negocio ganadero adquiriendo una finca en Extremadura. El artista compaginó esta nueva faceta de empresario con la canción y el cine. En 1996 participó en la película "Libertarias", de Vicente Aranda.
En 1998, el mismo año en el que se lo relacionó sentimentalmente con la modelo mexicana Rebeca de Alba, Miguel se enfrentó a un nuevo reto: ser director y presentador de un programa de televisión. El cantante se puso al frente de "Séptimo de caballería", un espacio en el que contó con invitados de lujo del panorama musical a los que él entrevistaba. Poco después de que terminaran las emisiones del programa, el artista se vio involucrado en un aparatoso accidente de tráfico mientras viajaba con Rebeca. A consecuencia del percance, sufrió fractura y aplastamiento de la tercera vértebra lumbar, una lesión grave que lo obligó a llevar un corsé ortopédico durante meses. Miguel aprovechó su convalecencia para preparar su disco "Sereno".
Los primeros años del siglo XXI coincidieron con una etapa de gran creatividad del artista que sacó al mercado "Infancia olvidada" (2002), "Por vos muero" (2004) y "Velvetina" (2005). En el 2007 presentó "Papito", en el que interpretaba algunos de sus temas más emblemáticos a dúo con otros artistas. Con él se alzó en lo más alto de las listas de ventas y protagonizó una de sus giras más exitosas.
El 26 de abril del 2011, recién cumplidos los 55 años, Miguel sorprendía, al anunciar por Twitter que había sido padre. "Queridos tod@s, tengo una buenísima noticia que contaros: he sido papá de dos niños preciosos que ayer cumplieron un mes. Se llaman Diego y Tadeo. Estamos en casa y con buena salud. ¡Soy el hombre más feliz de la Tierra!" , aseguraba el artista, quien recurrió a un vientre de alquiler en Estados Unidos.
Encantado con la experiencia de la paternidad, no dudó en repetir y, en el año 2013, confesaba a la revista "Shangay": "Tengo cuatro hijos" . "A los siete meses de nacer Diego y Tadeo, llegaron otros dos mellizos, Ivo y Telmo. Muy poca gente lo sabía. Hasta ahora..." , explicaba el cantante, que también reveló que los dos mayores tienen los ojos verdes como él y los pequeños, de color azul.
Su turbulenta historia con Nacho Palau y sus problemas personales
Siendo padre de familia numerosa, prosiguió con su carrera musical, y en el 2012 presentaba "Papitwo", una nueva entrega de duetos con otros artistas.
A pesar del éxito de sus canciones, la crisis económica afectó a sus negocios, por lo que Bosé se vio obligado a desprenderse en subastas de valiosas obras de arte que poseía.
Cansado de no poder gozar de la privacidad que deseaba, dejó España para instalarse en Panamá con sus hijos y, durante su gira "Estaré", comenzaron los rumores de su mal estado de salud: se le veía cada vez más afónico y cansado.
Por otro lado, salió a la luz su relación de 26 años con el escultor Nacho Palau, con quien protagonizó una sonada ruptura, separando a los cuatro hijos de la pareja, y llegando a ir a juicio.
Durante la pandemia, la popularidad de Miguel Bosé cayó en picado al manifestarse claramente como negacionista y, mientras vivía sus momentos más difíciles, su querida madre, Lucía Bosé, murió a los 89 años precisamente a causa del covid.