Mila Ximénez: sus mejores momentos en 'Sálvame'

Desde que arrancó 'Sálvame' en 2009 hasta 2020, cuando anunció su retirada debido al cáncer de pulmón que le diagnosticaron, Mila Ximénez siempre fue una de las grandes bazas del programa. Colaboradora incansable y haciendo gala de un gran sentido del humor y de una gran personalidad, la exmujer de Manolo Santana nos hizo reír cada tarde con su espontaneidad. 

Nada hacía presagiar a Mila por aquel entonces que en 'Sálvame' viviría sus momentos profesionales más divertidos y que, entre los focos, encontraría a su segunda familia. Tan cómoda estaba la colaboradora en el plató, que durante todos estos años nos ha regalado irrepetibles momentos en los que, como espectadores, hemos acabado a carcajada limpia gracias a sus peculiares ocurrencias. 

Repasamos los momentos más divertidos de Mila Ximénez en 'Sálvame'

Ataques de risa espontáneos, desternillantes despistes, una inesperada fobia y, cómo no, ¡la croqueta! Mila Ximénez ha vivido cada día de emisión de 'Sálvame' con la ilusión de la primera vez, y eso se notaba en sus apariciones. 

Mila le tenía auténtico pánico... ¡a los globos!

Cuando, en 2019, Belén Esteban se casó con Miguel, el set de 'Sálvame' se convirtió en una fiesta. Adornado como si de una boda se tratase, los colaboradores estaban dispuestos en mesas redondas y Jorge Javier se lo pasaba como un niño con semejante decorado. Pero llegó un momento que hizo que Mila saltara como un resorte de su silla: cuando empezaron a explotar globos. 

La colaboradora reveló entonces que es un miedo irracional que sufrió desde siempre: no soportaba que explotasen globos a su lado. Jorge Javier, haciendo gala de su gran sentido del humor (y bromeando sobre su edad, ya que Ximénez era la más veterana del plató), le preguntaba, desatando la carcajada general, si el miedo a los estallidos le venía al recordar los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.

Cuando pensó que se le había caído un diente en directo... pero no

En una ocasión, Mila Ximénez y Lydia Lozano sufrieron tal ataque de risa que el programa se vio obligado a parar y preguntarles qué les pasaba. Ellas, que apenas podían hablar a causa de las carcajadas, explicaron lo siguiente.

Al parecer, Mila se había retocado los labios y se había pintado un diente sin querer. Lydia, para avisarla, le dijo "Mila, el diente"... ¡y ella pensó que se le había caído! 

Cuando se puso zapatos diferentes

Ay, ¡las prisas qué malas son! En esta ocasión fue Belén Esteban quien quiso parar el programa para revelar que Mila Ximénez llevaba zapatos diferentes.

Mila, ni corta ni perezosa, se levantó a mostrarlos: llevaba sandalias de la misma altura y del mismo color ¡pero con diferente tacón! Ante las risas de sus compañeros, ella con su desparpajo habitual explicó que lo que estaba haciendo era "crear tendencia". 

La tarde que casi termina con Mila desesperada

Hubo un día en el programa que homenajeaban diferentes profesiones y, a Kiko Hernández le tocó hacer de juez. Mila estaba sentada a su lado y, a mitad de programa, saltó como una hidra por lo molesto que le resultaba su compañero con el mazo. 

¡Casi abandonó el plató! Pese a la reprimenda de Mila y para carcajada general del público, Kiko no solo no paró de dar mazazos ¡sino que estuvo toda la tarde metidísimo en su papel!

Y para terminar... ¡sus legendarias croquetas!

No, no nos referimos a que Mila fuese una maestra cocinando la tapa española por excelencia... ¡más bien era una maestra rodando por el plató! Hubo un tiempo en el que, al igual que Lydia hacía el baile del Chuminero, ¡Mila Ximénez hacía la croqueta por el suelo siempre que tenía ocasión!