El padre Apeles preocupa en un delicado momento: "Me voy apagando poco a poco"
Unas palabras del popular sacerdote han hecho saltar las alarmas sobre su salud
El padre Apeles, en una imagen de archivo.
Lleva años retirado de la televisión, y una vida tranquila lejos de las polémicas que le rodeaban hace dos décadas. Ahora, el padre Apeles tiene fijada su residencia habitual en Roma, y allí ha descubierto un apacible modo de vivir con el que parece estar encantado.
Pero dicen que la tele tira y, por esa razón, el sacerdote más famoso de Telecinco ha decidido regresar a la TV, y lo ha hecho con un programa en Canal 4, que se podrá ver en Cataluña y Baleares.
Con motivo de su estreno, Apeles, cuyo verdadero nombre es José Apeles Santolaria de Puey y Cruells, ha hablado con el diario La Razón, pero sus palabras han sonado más pesimistas que de costumbre...
El padre Apeles, durante su etapa en Telecinco.
El padre Apeles se está "apagando poco a poco"
Desde Roma, el sacerdote viaja una vez al mes a Barcelona, donde graba en su día sus 4 programas semanales y regresa a Roma, donde vive muy tranquilo: "Leo, paseo, estoy en los archivos, voy a actos culturales…", ha confesado al citado medio.
Sobre cómo se encuentra de salud, Apeles tiene claro que está en el "ocaso" de su vida: "Estoy prácticamente jubilado, me falla la memoria, me cuesta dormir, levantarme de la cama, vamos, que me voy apagando poco a poco. Se me olvidan los nombres, me cuesta mucho concentrarme, recordar las cosas...", ha explicado.
El televisivo cura no tiene reparos ahora en mostrar su lado más vulnerable e, incluso, en sincerarse sobre la depresión que sufrió hace 10 años. "Me automediqué por la depresión y lo mezclaba con alcohol", declaró el pasado año en tu revista Pronto.