El Papa denuncia la indiferencia con la que se trata a los migrantes
Francisco ha pedido, además, que cese la propaganda alarmista contra ellos
En medio de la crisis migratoria que está sacudiendo a Europa tras los últimos días de caos vividos en Lampedusa con el desembarco de más de 12.000 personas, el papa Francisco ha querido llamar la atención del mundo sobre el drama que viven las miles de personas que cada año cruzan el Mediterráneo en busca de una vida mejor.
Una visita relámpago
El Papa visitó Marsella con motivo de los Encuentros Mediterráneos, una iniciativa de la Iglesia católica para que los países europeos gestionen el desafío migratorio con responsabilidad y no como una urgencia que agite aún más las propagandas alarmistas contra ellos.
Además, Francisco quiso denunciar los gestos de odio de los gobiernos que ponen trabas a las organizaciones humanitarias que realizan rescates en el Mediterráneo y sentenció rotundamente: "Quien arriesga su vida en el mar no invade, busca acogida".
"El cielo nos bendecirá si en la tierra y en el mar sabremos cuidar de los más débiles, si sabremos superar la parálisis del miedo y el desinterés que condena a muerte. En esto, nosotros, los representantes de las distintas religiones, estamos llamados a dar ejemplo", escribió en su cuenta de Instagram el Papa.