Paul Newman se culpaba de la muerte de su hijo Scott
Antes de estar con su segunda esposa, las chicas no le hacían caso. "Me veían como un payaso feliz", escribió en sus memorias póstumas
Catorce años después de su muerte y cuando creíamos saberlo todo del hombre más guapo del mundo, unas memorias póstumas, 'Paul Newman: The Extraordinary Life of an Ordinary Man' y una docuserie que emite HBO ponen sobre la mesa nuevas revelaciones acerca de la vida del protagonista de 'El golpe'.
Una de las más sorprendentes se refiere a su inseguridad y las dificultades que tuvo para que las mujeres le hicieran caso. El que acabó siendo un sex symbol de Hollywood asegura que no le tomaban en serio y que le veían "como un payaso feliz".
Paul no se sintió sexy hasta que conoció a su segunda esposa, Joanne Woodward, en 1953. "Ella me convirtió en una criatura sexual y dejamos un rastro de nuestra pasión en todas partes, hoteles, parques públicos y coches de alquiler", relata el actor.
Se culpaba de la muerte de su hijo Scott
Sin embargo, a pesar de su maravillosa y longeva historia de amor, también pasaron momentos de crisis, muchas veces por la afición de Paul a la bebida. "Tenían peleas, pero no se alejaron", explica Claire, una de las tres hijas que tuvo el actor con Joanne.
Y hablando de hijos, la muerte por sobredosis en 1978 de su primogénito, Scott, fruto de su primer matrimonio, con Jackie Witte, fue un golpe del que jamás se recuperó. "Pensaba que estaba aún en una etapa adolescente. Nunca creí que sería fatal", escribe, admitiendo que su alcoholismo pudo haber sido un mal ejemplo para su hijo.