Pipi Estrada: "Me preocupa mucho que hayan ingresado a Miriam de nuevo"
El periodista lamenta que se hayan agravado los problemas mentales de la madre de su hija menor, que accedió a ser hospitalizada el pasado 25 de agosto
Aunque ha intentado contactar con su ex, Pipi no lo ha conseguido.
Hace años que la exactriz porno Miriam Sánchez es noticia por los altibajos en sus adicciones y en su salud mental. La situación de la que fuera pareja de Pipi Estrada empeoró recientemente hasta el punto de que ella misma accedió a ingresar en la Clínica López Ibor de Madrid para que la trataran.
En un primer momento, los médicos decidieron inducirle el coma para realizarle pruebas neurológicas. "Me preocupa mucho el estado de Miriam y que hayan tenido que ingresarla de nuevo. Le he dicho a nuestra hija que se relaje y se tranquilice y que, cuando la situación se vaya aclarando, que llame a su madre y me cuente como se encuentra, porque yo no consigo contactar ni con ella ni con su entorno", nos aseguró el periodista, con el que Miriam tiene una hija de 16 años.
Miriam Sánchez, la expareja del periodista.
"Mi hija quería volver conmigo"
PRONTO: ¿La niña estuvo con Miriam el día anterior a su ingreso?
PIPI ESTRADA: Sí, quedaron para cenar y mi hija vio en su madre actitudes y comportamientos que no le gustaban. Me llamó para decirme que estaba pasando mucha vergüenza y que quería volver conmigo… Al día siguiente ingresó en la clínica, según contó su novio, Fernando, porque Miriam dice que "la estamos matando entre todos y que se siente mal psicológicamente".
La decisión de entrar en el centro especializado la tomó Miriam el pasado 25 de agosto, pero el problema viene de lejos. En el 2019, ella misma habló públicamente de sus problemas de salud mental, revelando que, cuatro años antes, le habían diagnosticado una depresión. "He estado a punto de hacer muchas tonterías", aseguró en televisión.
Fue después de que se rompiera definitivamente su relación con Pipi cuando la que fuera ganadora de 'Supervivientes' en el 2008 entró en una espiral autodestructiva con el consumo de drogas y alcohol y protagonizó numerosos altercados tanto en locales como en plena calle, unos episodios que no pudo evitar que llegaran a ser conocidos por la opinión pública.