Rafa Nadal se emociona al hablar de su hijo
Aunque siempre ha sido muy discreto con su vida privada, el tenista sí que ha hablado sobre lo mucho que le ha cambiado la vida convertirse en papá
Rafa Nadal y su mujer se convirtieron en padres el pasado 8 de octubre.
Rafa Nadal afrontaba el Open de Australia con la ilusión de repetir el título obtenido en el 2022, pero una inoportuna lesión se lo impidió. Aunque durante el partido contra el estadounidense Mackenzie McDonald sintió una punzada en la cadera de la pierna izquierda, el tenista no se retiró y siguió jugando, incluso cojeando, pero le fue imposible ganar el partido.
Ni la presencia de su mujer, Mery Perelló, que lloró en las gradas al verlo sufrir de dolor, ni la de su bebé, que ahora lo acompaña en las competiciones, fueron el talismán que necesitaba el manacorí para conseguir otra de sus gestas.
Mary (empujando el cochecito) y el pequeño Rafa (en brazos de su cuidadora) no han dejado solo al deportista.
"Agradezco a mi familia que esté aquí, me ayuda mucho"
Toparse con una nueva lesión resultó frustrante para el deportista. "No puedo decir que no esté mentalmente destrozado ahora mismo porque estaría mintiendo. Espero que no sea algo demasiado grave", aseguró tras el partido.
Su ánimo era muy diferente al que mostró tras vencer en el primer encuentro, cuando no dudó en contestar a las preguntas personales que le hizo un periodista a pie de pista. "Ser padre cambia la vida a todo el mundo y es una de las cosas más bonitas que te pueden pasar. Disfruto de este momento", confesó, risueño, el deportista, dejando entrever que se le cae la baba con su pequeño Rafa, de 3 meses.
El mallorquín también hizo referencia al hecho de que su esposa e hijo lo acompañaran en los torneos. "Es un momento fantástico. Tengo a mi familia aquí en Australia y se lo agradezco, porque me ayuda mucho. Se me hace muy duro imaginarme estar muchos meses fuera de España sin estar a su lado", manifestó antes de añadir: "Creo que me hubiera influido negativamente si yo hubiera tenido que estar aquí un mes y ellos no hubieran podido acompañarme. Uno no sabe cómo va a reaccionar".