Rafa Nadal: sus primeras semanas tras su emotivo adiós del tenis
El tenista puso punto final a su carrera deportiva profesional con un partido de la Copa Davis entre España y Países Bajos

Nadal, emocionado.
"La realidad es que uno nunca quiere llegar a este momento. No estoy cansado de jugar al tenis, simplemente el cuerpo ha llegado un momento en que no quiere jugar más, con lo cual hay que aceptar la situación. Me siento un superprivilegiado. Sólo puedo dar gracias a la vida. Hice de mi 'hobbie' mi profesión".
Con estas emotivas palabras, Rafael Nadal, el mejor tenista español y uno de los mejores del mundo de todos los tiempos, ponía punto y final a su carrera profesional tras caer el equipo nacional ante Países Bajos en la Copa Davis, el último torneo oficial que disputaría en sus 38 años de vida.

En esa competición, que se celebró en Málaga, Rafa Nadal estuvo arropado por sus incondicionales: su equipo, liderado por su entrenador, Carlos Moyà; sus padres, Sebastián y Ana María; su esposa, Mery Perelló, que sostenía en su regazo al hijo de ambos, Rafael, de 2 años; su hermana y sus mejores amigos.

Su entrenador, Carlos Moyà, así como su familia y la esposa de Carlos, Carolina Cerezuela, no pudieron contener las lágrimas.
Todos ellos se unieron al público en una sentida ovación y no pudieron contener las lágrimas al ver a la leyenda del tenis tan conmovido.
El precioso mensaje de su rival y amigo, Roger Federer

Roger Federer le dedicó a Rafa Nadal unas bonitas palabras de homenaje.
Del mismo modo en que Rafa Nadal estuvo presente en la despedida del que ha sido su mayor rival en las canchas a la par que gran amigo, el suizo Roger Federer quiso participar en la del manacorí y, al no poder estar físicamente, le envió una conmovedora carta que refleja a la perfección lo importante que ha sido su relación.

Nadal y Federer jóvenes.
“En arcilla, sentí que estaba entrando en tu patio trasero, y me hiciste trabajar más duro de lo que jamás pensé que podría hacerlo solo para mantenerme firme. Me hiciste reimaginar mi juego, llegando incluso al punto de cambiar el tamaño de la cabeza de mi raqueta, esperando obtener alguna ventaja. No soy una persona muy supersticiosa, pero tú lo llevaste al siguiente nivel. Todo tu proceso. Todos esos rituales. Juntar tus botellas de agua como si fueran soldados de juguete en formación, arreglarte el cabello, ajustar tu ropa interior... Todo eso con la máxima intensidad. En secreto, me encantaba todo el asunto. Porque era tan único, tan tú", fueron algunas de las palabras que Federer le dedicó a su compañero.
Rafa Nadal, agradecido con todos los que le han ayudado

Carolina y Mery emocionadas.
Rafa Nadal tuvo unas preciosas palabras para todos, empezando por su público. "Han sido 20 años de carrera profesional en los que me habéis llevado en volandas siempre –expresó–. En los momentos buenos, me ayudabais a ganar el siguiente punto, y en los malos, me empujabais a seguir peleando".
A todos los que le han ayudado directamente a llegar a lo más alto, les dijo: "Creo en la continuidad, en mantener a las personas que realmente te quieren y hacen que tu vida sea mejor cerca de ti. Es lo que he intentado durante toda mi vida: hacer pocos cambios en mi equipo, y eso me ha llevado a tener una relación con todos vosotros que va más allá de la carrera profesional. Por todo ello, mil gracias, sin vosotros nada de todo esto habría sido posible".

Con una deportividad digna de admiración, también tuvo palabras para aquellos con los que se ha enfrentado en las pistas, entre los que, a pesar de su espíritu incansablemente competitivo, ha hecho buenos amigos. "Mis rivales me han empujado a tener una carrera muchísimo más larga y exitosa que la que hubiera tenido sin grandes rivales enfrente. David -Ferrer- ha sido uno de ellos, y a otros que no están aquí les agradezco haber compartido tanto juntos".
"Lo que he intentado es ser buena persona"

Rafa Nadal dando su discurso de despedida.
En cuanto a los suyos, Rafa Nadal ha recordado que siempre los ha tenido a su lado porque es un hombre profundamente familiar y su apoyo ha sido básico para él en todo momento: "No me han fallado nunca –aseveró–. Han estado conmigo en los momentos en los que las cosas parecían imposibles. En los momentos en los que las cosas iban bien, me han mantenido con los pies en el suelo, y creo que eso hace que el momento de hoy y lo que vaya a pasar en el futuro sea realmente más fácil de llevar. Sé que viene un proceso, no sé si difícil, pero de adaptación, y estoy tranquilo porque creo que he recibido una educación que me permite encarar lo que viene con tranquilidad, con la satisfacción personal de haber hecho todo lo que he podido hasta el final. Estoy tranquilo porque tengo a una gran familia alrededor que me ayuda en todo lo que hago".

Rafa Nadal se despidió de su público muy emocionado.
Consciente de que, pese a su humildad, es una leyenda, Rafa Nadal quiso dejar unas palabras que puedan servir de guía para los que vienen detrás de él, sean deportistas de élite o no: "Lo que he intentado es ser buena persona y espero que así lo hayáis percibido (...) Me voy con la tranquilidad de que de alguna manera he dejado un legado deportivo y personal. Muchísimas gracias por todo".
La nueva vida de Rafa Nadal con su familia

Rafa Nadal durante su último partido.
Rafa Nadal ha iniciado una nueva etapa en su vida tras su emotivo adiós al tenis profesional, dejando atrás años de esfuerzo y sacrificio en las pistas. Ahora, el mallorquín ha decidido disfrutar de los frutos de su carrera junto a los suyos, eligiendo la Costa del Sol como su refugio. En Fuengirola, se le vio recientemente en una salida familiar, acompañado por su esposa, Mery Perelló, su hijo Rafael, sus padres y su hermana Maribel. Juntos, disfrutaron de una comida en el prestigioso restaurante Los Marinos José, donde Nadal lució una imagen relajada y feliz, muy alejada de su conocida imagen de guerrero en la pista.
Además de relajarse junto a su familia, Nadal ha encontrado en Málaga un lugar ideal para desarrollar sus nuevos proyectos. Junto al empresario Abel Matutes, el tenista está impulsando una ambiciosa inversión inmobiliaria que incluirá viviendas de lujo en Marbella, Estepona y Fuengirola, además de un club de tenis en Málaga. Un movimiento que no solo busca aumentar su patrimonio, sino también dejar su huella en la región, uniendo su pasión por el deporte con el lujo y el estilo de vida.
Este nuevo capítulo en su vida es un merecido descanso después de años de éxito y sacrificio. Ahora, Rafa Nadal se dedica a disfrutar de la tranquilidad de su entorno familiar y a ver crecer a su hijo, sin las presiones de la competición. Tras haber sido siempre respaldado por los suyos, el tenista se siente más cerca que nunca de ellos y de sus nuevos proyectos.