Raphael: "Mis hijos me juzgan mucho, pero me siento muy bien con ellos"
El artista de Linares acaba de presentar una serie sobre su vida, donde nos muestra su faceta más cercana y familiar
A sus 78 años, y tras más de 60 en la música, a Raphael le ha llegado la hora de repasar todo lo que le ha sucedido en su intensa vida y compartirlo con el gran público. Así, el pasado 13 de enero se estrenó la serie completa "Raphaelismo", que nos acerca a los éxitos y la sombras del irrepetible artista de Linares.
Al cantante nunca le ha gustado mirar al pasado, presume de no tener ni un ápice de nostálgico y se lamenta de que su mente nunca está en el ayer, sino en el mañana, algo que no le deja disfrutar de su inabarcable éxito, pero que le ayuda a pulirse y a ser mejor día a día.
Ahora, el legendario Raphael ha permitido que nos adentremos en su recorrido vital y artístico y recorramos la historia de su éxito y de su vida familiar. Y es que el cantante andaluz ha dejado definirse en pantalla con una serie documental maravillosa –e imprescindible– producida por Movistar, Dadá Films and Entertainment y Universal Music Spain y dirigida por Charlie Arnaiz y Alberto Ortega.
"Raphaelismo" consta de cuatro capítulos que recorren su infancia, sus primeros éxitos, su impresionante carrera, su lado más íntimo y familiar, su descenso a los infiernos y su renacer tras su trasplante de hígado.
"Hablar de mi trasplante es mi único tabú"
A punto de irse de gira por Latinoamérica y con la agenda repleta de planes, el artista, de 78 años, tuvo un encuentro con la prensa donde nos contó por qué ahora ha querido abrir esa ventana a su vida, a su amor, a su profesión y a su impresionante historia. "Hace años que me lo llevan proponiendo. Ha sido el tiempo, que todo lo cura, y que es una maravilla que pase. El tiempo ha hecho que yo mismo entienda que había llegado la hora", dijo divertido.
PRONTO: ¿Qué ha sido lo que más te ha costado recordar?
RAPHAEL: Recuerdo todo, pero no ha sido nada agradable hablar de mi trasplante, es mi único tabú. Lo paso mal y no me gusta, pero me obligo a hablar de ello. Me cuesta trabajo porque fue algo fuerte, pero he hablado de ello con el corazón en la mano.
"Mis hijos son un equipo maravilloso"
P.: El documental cuenta con el testimonio de varios artistas y también de tus familiares. Tus hijos han hablado de ti con mucha emoción.
R.: A mí me gusta mucho la visión de mis hijos, me encanta saber lo que opinan, en qué me apoyan y en qué no. Les preocupa su padre y opinar de todo les gusta, hasta del abrigo que me pongo. Me juzgan mucho, pero me siento muy bien con ellos. Mis hijos son un equipo maravilloso. Su implicación en la serie ha sido total y hubiera sido muy diferente de no contar con ellos. Jacobo me siguió durante años con una cámara, yo no me acordaba ya de esas imágenes. Ha sido estupendo poder recuperarlas.
"Jamás me despediré del público, no podría"
P.: Los fans te acompañan y aumentan desde el inicio, ¿te sigue sorprendiendo?
R.: Es un milagro, el mayor milagro, que me pasa desde los 15 años. Voy cambiando de generación y la gente sigue ahí y se suman más. Me lo creo porque lo veo, pero no me lo creería si me lo contaran. Hay que ser muy templado y tranquilo para asimilarlo y no volverte un gilipollas. Sería lo lógico, pero no me ha tocado.
P.: ¿Te has puesto límite en el escenario?
R.: No, lo sabré el día que me toque. Me pillará durmiendo o camino a un concierto. Llamaré a la oficina y diré "conmigo ya no contéis". Jamás me despediré del público, no podría, empezaría a llorar y no pararía. Pero mi retiro está todavía muy lejos, habrá "Raphaelismo" dos y tres.
P.: ¿Cómo te gustaría que te recordaran?
R.: ¿Me van a recordar?
P.: No lo dudes.
R.: Ojalá me recuerden como soy de verdad, una persona tremendamente cercana a mi familia y a mi público. Me gustaría que sintieran algo más que "qué bien canta este chico". Es difícil de conseguir y, sobre todo, de mantener.