Richard Gere explica por qué ha venido a vivir a España con Alejandra Gere
El actor de Hollywood y su esposa han adquirido una mansión en La Moraleja para disfrutar de una vida familiar y cerca de las raíces de la empresaria
Richard Gere y su mujer, Alejandra Gere, ya están listos para dar un giro radical a su vida y pasar de las costumbres americanas a las mediterráneas. Tras casi 10 años de relación, el actor y la empresaria han decidido mudarse a España junto a sus hijos, Alexander y James, nacidos en 2019 y 2020. Este importante cambio coincide justamente con el décimo aniversario de su historia de amor, que sigue siendo tan sólida como el primer día.
Uno de los últimos compromisos profesionales del protagonista de ‘Pretty Woman' fue acudir como invitado especial al programa de Jimmy Fallon, al cual no regresaba desde 2015. “Mi mujer es española y me proporcionó siete años aquí. Ahora, vamos a dedicar nuestro tiempo en Madrid”, confesó Gere, explicando las razones detrás de su decisión.
Una mansión en La Moraleja para empezar una nueva vida
El matrimonio ha adquirido una impresionante mansión en La Moraleja, una exclusiva urbanización en las afueras de Madrid. La casa, con 800 metros cuadrados y un amplio jardín, es perfecta para disfrutar de la familia y adaptarse a las necesidades de sus pequeños, quienes tal como asegura Richard Gere, “son bilingües”.
Richard y Alejandra, padres de dos hijos, están felices ante este cambio.
La decisión de mudarse a España también responde al deseo de Alejandra Gere de estar más cerca de su familia y amigos, quienes han sido un apoyo constante para ella. Además, Alejandra Gere, criada en una familia de fuertes raíces españolas, ha tomado el rol de matriarca tras el fallecimiento de su abuela. “Ahora ya organiza comidas de hasta 35 personas los domingos”, relató Gere con cariño, afirmando que el próximo 28 de noviembre festejará ‘Acción de Gracias’ en España.
Richard Gere y Alejandra Gere: de Nueva York a Madrid
La mansión de Connecticut.
Hasta ahora, Richard y Alejandra Gere habían vivido en un espectacular rancho georgiano en Connecticut, a una hora y media de Nueva York. La propiedad, de 130.000 metros cuadrados, se vendió hace apenas unos días por unos 11 millones de dólares. Sin embargo, el actor ya se despide de su vida en Estados Unidos con emoción y nostalgia, pero todo sea por su mujer, la cual describe como “increíble” y como “gran madre”.