Tras anunciar que abandona el cine definitivamente, Robert Redford, de 82 años, ha decidido vender la fabulosa mansión en la que ha vivido más de 10 años y a la que llamó Danza del Sol.
Situada en el californiano Valle de Napa, se trata de un caserón de 485 metros cuadrados distribuidos en dos plantas que cuenta con tres habitaciones, tres baños –uno de ellos con bañera de hidromasaje–, un enorme salón con chimenea de piedra, una gran cocina, gimnasio, piscina, taller y huerto, además de una casa independiente que alberga el estudio de pintura de su mujer. Todo ello ubicado en una finca de 40.000 metros cuadrados rodeada por un precioso paraje natural lleno de robles que aisla la casa y la convierte en un inexpugnable retiro.
Robert Redford ha dicho de ella que «hemos disfrutado tanto de la soledad que brinda el hogar como de la cercanía al Valle de Napa y todo lo que tiene para ofrecer».