Tamara Falcó celebra su cumpleaños en las Maldivas junto a Isabel Preysler y Ana Boyer

Cuando Tamara Falcó rompió con Íñigo Onieva en lo que se convirtió en un huracán mediático viral, lo que siempre tuvo claro es que tendría el apoyo incondicional de su familia. Coincidiendo con su 41 cumpleaños, hace dos semanas, la hija de Isabel Preysler decidía alejarse del frío y viajaba a las Maldivas, donde pasó unos días de desconexión tras una nueva vuelta al sol muy agitada. ¡Y no estuvo sola!

Su madre y su hermana, Ana Boyer, no tardaron en sumarse al planazo de cumpleaños de la marquesa de Griñón. Fernando Verdasco y sus dos hijos, que son el ojito derecho de la cumpleañera y siempre consiguen sacarle una gran sonrisa en los momentos más difíciles, también se unieron y le prepararon una impresionante fiesta de cumpleaños.

"Hay destinos que te dejan con ganas de volver siempre. Tal es el caso de las Islas Maldivas" escribía en Instagram un día antes, cuando reveló cuál era el lugar paradisíaco al que se había escapado por su cumpleaños. Todavía no había mostrado las fotos de la sorpresa, pero comentó que había sido "un sueño hecho realidad y una forma totalmente distinta de celebrar mi cumpleaños" gracias a la gran sorpresa de Ana e Isabel.

Este domingo, para recordar estos bonitos momentos, ha compartido las mejores fotos y vídeos en una publicación en redes sociales. Una foto paseando con dos de las mujeres de su vida, un vídeo de la cena en la playa con la que nos ha hecho la boca agua... por las sonrisas de Tamara Falcó, ¡es evidente que fue una noche espectacular!

"Dream team. ¡Y me habían organizado este surprise birthday celebration!" escribió sobre la publicación y sobre una de las historias de Instagram, en la que mostraba al detalle la cena que habían preparado para ella.

A pesar de que Íñigo Onieva trató de recuperarla, la marquesa se mostró inamovible tras ver las imágenes de su infidelidad y las mentiras que le había contado. Esta situación azotó su relación justo cuando se acababan de comprometer, en un momento que parecía traer momentos muy dulces consigo. Aunque él ha desaparecido de su vida, los sentimientos de dolor ya son cosa del pasado.