Tamara Falcó, muy enfadada: "Yo estoy en mi peso normal"
La futura mujer de Íñigo Onieva ha roto su silencio ante todos los rumores que hay sobre su aumento de peso…
Tamara se ha defendido de las críticas.
En plena cuenta atrás para su boda, la polémica rodea de nuevo a Tamara Falcó. Poco le ha durado la felicidad tras su viaje a Nueva York para visitar el taller de Carolina Herrera y probarse por primera vez el vestido de novia que lucirá en el día más importante de su vida; el nuevo frente abierto de la marquesa de Griñón, las informaciones que aseguran que va a ingresar en una clínica especializada en pérdida de peso para adelgazar alrededor de 10 kilos antes de dar el 'sí quiero' a Íñigo Onieva.
Al parecer, la hija de Isabel Preysler no estaría demasiado cómoda con el peso que ha cogido en los últimos meses y habría decidido pasar cerca de 20 días en una prestigiosa clínica de Marbella para, con una dieta estricta -que incluye ayunos y alimentación a base de zumos y caldos vegetales- supervisada por profesionales, perder casi una decena de kilos para lucir perfecta en su boda.
Entrada de la lujosa clínica de ayuno favorita de Tamara.
¿Qué piensa Tamara Falcó de su pérdida de peso?
De hecho, Tamara ya ha asistido a este prestigiosa clínica, cuyo programa de ayuno terapéutico de 10 días cuesta más de 4.000 euros, ya que Mario Vargas Llosa, el ex de su madre Isabel Presyler, era un asiduo a este lugar.
Sin embargo, la socialité ha roto su silencio sobre este tema en 'Vanitatis' e, indignada, ha desmentido que tenga intención de bajar 10 kilos en poco más de un mes. "El vestido me lo hacen a medida y, por lo tanto, está hecho a mi cuerpo. Menuda tontería y falta de respeto. Yo estoy en mi normopeso" ha afirmado molesta por los titulares que ha acaparado su físico en los últimos días.
Tamara ultima los preparativos de su boda.
Lo que sí es cierto es que pasará unos días en esta lujosa clínica -como ya hizo en agosto de 2022- para someterse a una dieta detox y a tratamientos de belleza, como hacen muchas novias antes de su gran día.
Las lujosas instalaciones de la clínica donde irá Tamara.
Pero nada de perder lo que se ha apuntado en diferentes medios de comunicación: "Para bajar esos kilos tendría que estar un año. Que podría estar más delgada, pues sí; pero, vamos, que lo encuentro todo un poco indignante. Como ya he dicho varias veces, para mí lo importante es el sacramento del matrimonio" ha zanjado sobre un tema que no le ha sentado nada bien y ha visto empañada, una vez más, la ilusión que tiene por su boda con Íñigo.