Su espontaneidad y su sinceridad han sido dos de los grandes motivos para que, desde su entrada en la casa, Laura Matamoros se granjeara la simpatía de una gran mayoría de los espectadores de la cuarta edición de «Gran Hermano VIP», que, con sus votos, la convirtieron en ganadora. Jordi González anunció la noche del pasado 14 de abril que la concursante se había impuesto a su rival, Carlos Lozano, obteniendo el 57,9% de los votos. Incrédula cuando oyó su nombre como vencedora, Laura se emocionó y corrió a abrazarse con los concursantes que había tenido más relación. A partir de ahora, la vida de la hija de Kiko Matamoros –y también la de Carlos Lozano– van a ser muy diferentes. PRONTO te revela esta semana cómo se presenta su futuro inmediato.