El chico con síndrome de Down que apeló ante la ONU por una educación inclusiva
Rubén Calleja y sus padres llevan 11 años luchando por una educación inclusiva
Rubén, que trabaja de administrativo, con sus padres, Lucía Loma y Alejandro Calleja.
La lucha de este joven leonés y sus padres empezó en el 2012, cuando Rubén Calleja fue obligado a dejar la escuela ordinaria en la que estudiaba para ir a un centro de educación especial. Sus padres, Alejandro Calleja y Lucía Loma, estaban en total desacuerdo porque su hijo, con síndrome de Down, nunca había tenido problemas en el colegio ni con sus compañeros y creyeron que, con esta decisión que había adoptado su tutor, vulneraba su derecho a una educación inclusiva.
El matrimonio decidió que Rubén estudiaría en casa, con apoyo externo, y después cursó una FP básica, al tiempo que iniciaron un proceso judicial contra el Estado, reclamando una indemnización de 350.000 euros por los daños sufridos, que les llevó hasta la ONU.
La Fiscalía recurrirá en el Tribunal Supremo
Allí les dieron la razón en el 2017, pero la Audiencia Nacional negó el derecho de Rubén,que ahora tiene 23 años y trabaja de administrativo, a recibir esa indemnización. Ahora, sin embargo, han logrado un avance contra esta última sentencia: la Fiscalía la recurrirá, a su favor, en el Tribunal Supremo.