Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa: todo sobre su extraña separación
La pareja se ha enfrentado a rumores de crisis en las últimas semanas, aunque niegan que haya un distanciamiento
Mario, de 86 años, e Isabel, que tiene 71, empezaron su relación en el 2015.
Es la suya una historia de amor ya consolidada, que nació hace siete años. En este tiempo, Mario Vargas Llosa, de 86 años, ha residido en la casa que Isabel Preysler, de 71, tiene en Puerta de Hierro, la mansión que se construyó en los años 90 con su marido de entonces, Miguel Boyer. Hasta ahora.
Primera vez en siete años que Mario no duerme en casa de Isabel
Una publicación destapó que Mario Vargas Llosa llevaba 10 días instalado en su piso del centro de Madrid y no en la mansión de su pareja.
El mismo medio aportaba, además, fotografías, tomadas durante varias jornadas, en las que se le ve cumplir con una rutina que incluye un paseo matinal, con ropa cómoda, y el regreso al piso, para leer y probablemente trabajar y escribir. Un dato revelador de este seguimiento es que Mario también estaba pasando las noches en su piso, en lugar de hacerlo en Puerta de Hierro, como ha venido sucediendo en los últimos siete años.
La pareja asistió a la presentación del último libro del autor peruano.
Esta circunstancia ha hecho que resulte inevitable que más de uno se pregunte si, entre esta pareja de alto standing (ella, reina del papel cuché, y él, Nobel literario) hay crisis o se ha producido un distanciamiento. Pero justo después de que se publicara esta noticia, el autor peruano acudió al domicilio de Isabel, a primera hora de la mañana, como si con ello quisiera acallar los rumores.
No tuvimos que esperar mucho tiempo antes de que la propia Isabel Preysler lo desmintiera todo, al igual que él y es que, tal y como ya adelantaba Tamara Falcó al inicio de estos rumores, su relación de pareja continua.
En busca de tranquilidad para escribir un libro
Entonces, ¿por qué se le ha visto frecuentar su piso y pasar en él la noche? Existen varias respuestas posibles que explicarían este hecho.
Mario ha aprovechado sus actos públicos para desmentir que Isabel y él vivan separados.
Por un lado, que el literato esté escribiendo un nuevo libro y haya cambiado de casa para tener más tranquilidad y concentrarse mejor, aunque, desde que está con Isabel, ha trabajado y acabado sin problemas varias obras sin dejar la mansión de Puerta de Hierro. Por otro lado, se ha comentado que la boda de Álvaro Castillejo, sobrino de Isabel (que es la madrina del novio), podría haber hecho que ésta necesitara más espacio para alojar a todos los familiares que asistieron a este enlace.
Lo que sí está claro es que, a pesar de haber estado (o estar) viviendo separados físicamente, Isabel y Mario han asistido juntos a dos eventos, la ceremonia de entrega de la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica y, días después, la presentación del nuevo libro del autor peruano, 'La mirada quieta'. Y en ambos actos se les vio tranquilos y tan correctos como es habitual en ellos.
Estos días, Vargas Llosa ha estado acompañado por su hija, Morgana, de vacaciones en Madrid. Preguntada acerca de su padre dijo que estaba "muy bien", y respecto a su situación sentimental se limitó a comentar: "No hablo de la vida privada de mis padres".