Iker Casillas y Sara Carbonero durante la Gala de los Dragones de Oporto (2017).
Iker Casillas y Sara Carbonero forman una de las parejas estables del panorama social de nuestro país. La pareja se ha ido haciendo fuerte a medida que la vida les ha ido poniendo trabas, especialmente el año pasado, cuando ambos recibieron dos grandes sustos relacionados con la salud. El futbolista sufrió un infarto mientras entrenaba en Oporto por el que tuvo que ser operado de urgencia y, solo unos días más tarde, a Sara le detectaron un tumor maligno en el ovario durante una revisión rutinaria.
Los negocios de Iker
Además del apoyo en los temas personales, ambos se dan constante soporte también en lo profesional, tanto en sus trabajos habituales como en las iniciativas y nuevos proyectos que ponen en marcha.
La pareja ha aprovechado sus ingresos económicos para invertirlos en la fundación de otros negocios. Así, han creado una importante red empresarial que va desde la gestión de la imagen, la moda o el desarrollo de proyectos solidarios.
La primera compañía que puso en marcha el deportista fue Ikerca, S.L., en 2000, al poco de debutar en primera división en el Real Madrid. La empresa nació con el fin de gestionar los derechos de imagen del guardameta y sus inversiones inmobiliarias. En los últimos años la empresa está registrando pérdidas continuadas.
A pesar del descenso del patrimonio de la compañía, todavía puede presumir de que en esta cuenta el portero tiene casi 12 millones de euros.
Otra de las empresas de Iker es Casillas World, que gestiona su fundación y la marca de ropa 1K, ambas enfocadas a apoyar proyectos solidarios relacionados con la infancia.
Por último, la compañía Casillas Fútbol & Marketing 2011, S.L. está dedicada a la gestión de los derechos de imagen del deportista. Esta empresa, tampoco registra unas cifras demasiado positivas.
La faceta empresarial de Sara
La suerte de la periodista en los negocios está repartida al 50%. La primera de las sociedades que puso en marcha fue Recuerdos de Sudáfrica. Una agencia de publicidad que creada en 2010 con un buen rendimiento y cierta estabilidad.
El otro negocio más conocido de Sara es el que creó junto con su amiga y presentadora de televisión, Isabel Jiménez. Se trata de la web multimarca de venta online Slow Love. Esta sociedad arrancó en 2015 y tras unos primeros años en los que parecía que el negocio iba “viento en popa”, las cuentas empezaron a dar malos resultados. Actualmente se encuentra en una situación muy delicada.
Recientemente, la periodista también ha anunciado su colaboración con la firma de joyería Agatha Paris, con quien trabaja como diseñadora.
Iker y Sara, como muchos otros famosos, decidieron diversificar sus fuentes de ingresos en diferentes áreas de negocio. Ahora bien, independientemente del objetivo del proyecto, lo que tienen en común todas estas iniciativas empresariales es que siempre son apoyadas por ambos.