La mujer de Kiko Rivera encajó la expulsión con gran entereza
¡Se rompe la última pareja en «Gran Hermano Dúo»! Y es que Irene Rosales ha sido la última expulsada del concurso, dejando a su marido absolutamente derrotado. Eso sí, solamente estarán una semana separados ya que en la próxima gala se desvelará el ganador del programa, que nos ha hecho vivir una edición de lo más movidita…
María Jesús, Kiko, Juan Miguel, Alejandro Albalá e Irene aguardaban ayer nerviosos la decisión de la audiencia, que votaba por su favorito. Una vez pausados los teléfonos y ubicados todos en la sala de expulsiones, Jordi González fue salvando a los concursantes hasta que se quedaron solamente Irene y Alejandro. Tras felicitar a ambos por su participación en el «reality», anunció quién debía abandonar la cada de Guadalix de la Sierra.
La mujer de Kiko Rivera encaró la noticia con una gran sonrisa: “No me preocupa porque mi objetivo ya lo he cumplido. Yo no quería tener el papel de ganadora de «Gran Hermano», sí quería ganar el concurso por necesidad», explicó. «Creo que mi familia habrá sido inteligente y en vez de dividir votos, habrá ido a por uno. Me alegro muchísimo que sea Kiko».
El programa permitió a la pareja que se despidiera y al hijo de Isabel Pantoja le costó creer que realmente su mujer había sido la expulsada. Cuando finalmente fue consciente de ello, no pudo dejar de llorar.
Una vez en plató, Rosales volvió a demostrar su gran entereza y reiteró, una vez más, su animadversión con María Jesús. «Es especialista en sacar de quicio a todo el mundo». La expulsada tiene ahora todas sus expectativas puestas en su marido, a quien el concurso le ha permitido acabar con su personaje de Paquirrín.