¿Qué hacer para no resfriarte este invierno? Todas las claves
¿Por qué hay personas que no se resfrían nunca y otras lo hacen con mucha frecuencia?¿Qué papel juegan nuestras defensas en ello? ¡Te lo contamos!
Conoce todas las claves para evitar resfriarte este invierno.
Se calcula que, como media, una persona sana puede sufrir entre dos y tres catarros al año como máximo.
Aunque pueden aparecer durante todo el año, es precisamente ahora, en invierno, cuando son más frecuentes. El frío intenso, la humedad y los cambios bruscos de temperatura bajan las defensas de nuestro organismo y nos hacen más susceptibles a enfermar.
Un entorno saludable
Es importante que tanto en casa como en tu lugar de trabajo, hagas todo lo posible para evitar la propagación y el contacto con los virus del resfriado.
El exceso de calor resulta perjudicial por dos razones. En primer lugar, hace que el contraste con el frío exterior sea más acusado, por lo que debilita nuestras defensas. Y, en segundo, al aumentar la sequedad ambiental, provoca que las mucosas se alteren y que resulte más fácil la entrada de virus en nuestro organismo. Para evitarlo, una buena idea es colocar cuencos de agua sobre los radiadores.
1. Limpieza
Elimina los gérmenes, frecuentemente de las superficies, con un producto desinfectante. Teléfonos, pomos de las puertas, ratón y teclado de ordenador, juguetes... son objetos que suelen ir de mano en mano y que pueden contribuir al contagio de virus. Hay que tener en cuenta que éstos pueden sobrevivir hasta 72 días, sobre todo en superficies no porosas como el plástico, el metal...
2. Cambio de ropa
Procura renovar la ropa de cama y las toallas a menudo, sobre todo si se comparten, ya que son un excelente vehículo de transmisión de enfermedades. Si hay alguien enfermo en casa, procura que tenga su propia toalla.
3. Ventilación
Durante los meses de invierno, es habitual que mantengamos la casa cerrada para, de esta manera, conservarla caliente. Esto hace que la concentración de microorganismos en el ambiente sea mayor y que, por lo tanto, sea más fácil enfermar. Para evitarlo, ventila a diario todas las estancias de la casa durante un mínimo de cinco minutos.
Fortalece tu organismo
Durante esta época del año, es necesario cuidarse más que nunca. Mantener el cuerpo fuerte y saludable nos ayudará reducir de forma considerable el riesgo de resfriarse.
1. Tranquiildad y descanso
Duerme las horas necesarias y no te canses inútilmente. Según un reciente estudio, las personas que duermen menos de seis horas al día tienen un riesgo cuatro veces mayor de resfriarse. Esto no quiere decir, sin embargo, que adoptes costumbres sedentarias. Hacer ejercicio moderado con regularidad te ayudará a activar tus defensas y sentirte mejor.
2. Frutas y verduras frescas
Son alimentos muy ricos en vitaminas y minerales, justo lo que necesitas para mantener tu sistema inmunológico en las mejores condiciones.
3. Una buena hidratación
El agua licúa la mucosidad y facilita su expulsión.También ayuda a hidratar las mucosas y, por lo tanto, a mantenerlas en buenas condiciones para evitar la entrada de virus en el organismo. Además de agua, puedes tomar zumos caseros de frutas y hortalizas, infusiones no estimulantes, caldos ligeros, etc.
4. Buenos hábitos
Evita el tabaco y no tomes alcohol en exceso. Procura mantenerte en un peso saludable y cuida al máximo tu higiene personal. Es la mejor manera de estar sano y no enfermar.
5. Abrígate bien
Las bajas temperaturas del invierno disminuyen la capacidad defensiva de las mucosas de las vías aéreas, lo que nos hace más vulnerables. Por esta razón, es muy importante taparse la nariz y la boca con la bufanda, ya que la mucosa nasal es una de las vías de entrada principales.
Medidas básicas para evitar el contagio
1. Lávate las manos varias veces al día
Esta costumbre reduce en un 45% el riesgo a resfriarse. Por esta razón, es primordial lavarlas siempre que lleguemos a casa, antes de cocinar y después de ir al baño. Hay que hacerlo a conciencia, con jabón, durante un mínimo de 40 segundos y sin olvidarse de la zona de entre los dedos, el dorso, etc.
2. Evita tocar los ojos, la boca y la nariz
Las manos pueden llevar los microorganismos perjudiciales desde las superficies infectadas a las mucosas de estas zonas, iniciando el proceso de contagio.
3. Usa pañuelos de papel
Al ser más porosos que los de tela absorben los virus, por lo que dificultan su transmisión. Es necesario, sin embargo, desecharlos después de cada uso.
4. Mantente alejado de las personas enfermas
Hazlo, al menos durante los dos primeros días del proceso catarral, ya que, mediante el contacto directo o a través de sus estornudos, pueden propagar el resfriado (es suficiente con que estornuden a menos de 5 metros de distancia).
5. Evita los espacios cerrados y muy concurridos
Centros comerciales, cines, transporte público, salas de conciertos... Cuanta más gente haya, más posibilidades tienes de enfermar.
