Los Reyes llegando a la cena de gala para celebrar la entronización de Naruhito y Masako de Japón, que tuvo lugar en Tokio.
El pasado 22 de octubre, Tokio vivió una jornada muy especial, marcada por la ceremonia del ascenso al trono del emperador Naruhito, de 59 años. Por este motivo, Tokio se llenó de «royals», que asistieron a esta entronización provenientes de todos los países del mundo. En esta cumbre de testas coronadas no faltaron los reyes Felipe yâLetizia, Guillermo y Máxima de Holanda, Haakon de Noruega, Felipe y Matilde de Bélgica, Carlos Gustavo y su hija, la princesa heredera, Victoria de Suecia; Federico y Mary de Dinamarca,âCarlos de Inglaterra y Alberto de Mónaco, entre otros.
Ante 2.000 invitados, de 170 países, el nuevo emperador se comprometió a trabajar en favor de «la felicidad del pueblo japonés y la paz en el mundo».
Y en medio de tanto mandatario, la reina Letizia consiguió convertirse en la protagonista en el mejor sentido de la palabra. Tras el éxito de sus looks en la fiesta Nacional y en Oviedo, la suma de su elegancia y su profesionalidad cautivó también a sus «primos reales» en Japón y Corea, quienes, desde que la periodista llegó a la vida de don Felipe, han visto cómo ha ido transformándose en la mejor representante que España podría tener.
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