Nuevo comunicado urgente: preocupación por la salud de la princesa Mette-Marit de Suecia
La Casa Real de Noruega anuncia una baja médica inmediata de la princesa heredera por el agravamiento de su enfermedad crónica, en un año marcado también por la polémica en torno a su hijo Marius Borg

Mette-Marit de Noruega.
La princesa Mette-Marit de Noruega vuelve a estar en el foco mediático por un motivo preocupante: su delicado estado de salud ha obligado a la Casa Real a emitir un nuevo comunicado urgente y a cancelar por completo su agenda oficial durante las próximas dos semanas. A sus 51 años, la esposa del príncipe Haakon ha sufrido un nuevo revés vinculado a la enfermedad crónica que padece desde hace años: fibrosis pulmonar.
La princesa Mette-Marit cancela su agenda por motivos de salud

Mette-Marit de Noruega.
Entre los actos suspendidos, destaca su participación en la Feria Internacional del Libro de Leipzig, evento que había generado gran expectación. El gabinete de comunicación ha confirmado que la cancelación se debe a síntomas relacionados con su enfermedad: “La Princesa Heredera presenta síntomas y dolencias diarias que afectan su capacidad para desempeñar sus funciones”.
Mette-Marit de Noruega: un estado crónico que limita su actividad oficial

Mette-Marit de Noruega.
Diagnosticada públicamente en 2018, Mette-Marit padece fibrosis pulmonar, una enfermedad que afecta los pulmones, dificultando la respiración y provocando fatiga crónica. Aunque ha intentado mantener su agenda institucional, su estado de salud ha ido marcando sus apariciones públicas, cada vez más reducidas.
El comunicado también advierte que esta situación podría repetirse en el futuro: “La Princesa Heredera necesita descansar más y el horario diario cambia más rápidamente que antes. Esto significa que puede haber cambios en su programa oficial con más frecuencia y con menos antelación”.
Mette-Marit: Un año complicado para la princesa de Noruega

Mette-Marit con Marius.
La noticia llega en un momento especialmente sensible para la princesa. Además del deterioro de su salud, Mette-Marit vive bajo una gran presión personal y mediática derivada de la situación judicial de su hijo mayor, Marius Borg. El joven, fruto de una relación anterior, ha sido acusado de varios delitos graves, como agresiones físicas, psicológicas y sexuales, así como de incumplimiento de órdenes de alejamiento.
Este escándalo ha impactado negativamente en la imagen pública de la familia real noruega, generando un clima de tensión que sin duda afecta al bienestar emocional de la princesa.

Marius, el hijo de Mette-Marit está envuelto en una complicada situación judicial.
Entre los problemas de salud y la crisis familiar, 2025 está siendo un año especialmente difícil para Mette-Marit. La combinación del agravamiento de su enfermedad crónica y las noticias que rodean a su entorno más cercano ha despertado una gran preocupación tanto dentro como fuera de Noruega.
Desde la Casa Real insisten en la necesidad de proteger su salud y bienestar, por lo que no se descartan nuevas bajas imprevistas o cancelaciones futuras. Mientras tanto, el país permanece atento a cualquier novedad sobre la evolución de su estado.